El desprendimiento de rocas y tierra desde lo alto de la montaña pone en riesgo la vida de los ocupantes de los vehículos.
Ante las lluvias de los últimos días la carretera Ocaña-Cúcuta estuvo cerrada durante varias horas debido a un deslizamiento presentado en el kilómetro 34 más 900 metros, cerca al municipio de Ábrego.
Operarios de la microempresa adscrita a la territorial de Ocaña se trasladaron hacia el sitio conocido como Blanquizales y lograron habilitar el paso a un solo carril mientras se despejaba en su totalidad el derrumbe.
El director de la territorial Ocaña, ingeniero Elías Jaimes Fernández, indicó que el paso se encuentra habilitado y entrega recomendaciones a los viajeros que utilizan la arteria vial para que tomen las precauciones necesarias encaminadas a evitar consecuencias mayores.
El desprendimiento de rocas y tierra desde lo alto de la montaña pone en riesgo la vida de los ocupantes de los vehículos.
(Foto: Javier Sarabia)
Igualmente, se trabaja en retiro del derrumbe presentado en el kilómetro 12 más 600 metros de la carretera Ocaña-Ábrego donde grandes rocas han caído. El paso en ese tramo es restringido a un solo carril para facilitar a los operarios el maniobrar, recalcó Jaimes Fernández.
“Se está pendiente de esos imprevistos debido a los fenómenos naturales y de inmediato se hace limpieza de la carretera”, reiteró.