La última vez que los vecinos del barrio 1 de Mayo en Villa del Rosario tuvieron una vía libre de basuras fue a mediados del 2015, cuando el actual alcalde, Pepe Ruiz, que en ese entonces estaba en campaña, lideró una jornada de limpieza de la trocha que los comunica con Los Patios.
Tras los comicios electorales las basuras y los escombros volvieron a reinar en la olvidada trocha. Colchones y muebles viejos, plásticos, escombros, podas y todo tipo de desechos de ambos municipios van a parar a esta olvidada vía.
En por lo menos un kilómetro de carretera se ve basuras a lado y lado. Un fétido olor inunda la vía en todo su trayecto.
La vecina Angelina Garzón, se quejó por los malos olores que se emanan en el lugar, producto de los animales muertos que allí arrojan y pidió una jornada de limpieza y recolección de residuos en el lugar.
“Por acá solo pasan a dejarnos los desechos de los demás barrios. Esto se convirtió en una especie de basurero ilegal”, explicó ofuscada Garzón.
Esta misma situación se vive en otras trochas de la ciudad. Entre Aguas Calientes y Morelli hay un botadero similar que pasa desapercibido. Por lo menos 300 metros de vía están tapizados de basura. La comunidad aprovecha su poca transitabilidad para botar sus desechos.
Entre Simón Bolívar y Camilo Daza aflora otro gran basurero comunal. En medio de las mallas de una de las pistas del aeropuerto arrojan escombros, basuras de todo tipo y podas.
Regularmente la empresa de aseo de esta zona hace jornadas de limpieza.
*La Opinión
