"Caos"
Esta situación era impensable en Austria hasta hace algunas semanas.
El excanciller conservador, Sebastian Kurz, había dado por "terminada" la pandemia, al menos para los vacunados.
Su sucesor desde octubre, Alexander Schallenberg "mantuvo demasiado tiempo la ficción" de que todo iba bien, comenta a AFP el politólogo Thomas Hofer.
Ante el aumento de casos, que llegó a niveles inéditos desde el inicio de la pandemia, el gobierno se centró en los no vacunados, cuando solamente 66% de los austríacos han recibido las dos dosis, contra 75% en Francia por ejemplo.
Solo posteriormente optó por medidas radicales, como este confinamiento previsto hasta el 13 de diciembre, y la obligatoriedad de la vacunación para la población adulta desde el 1 de febrero de 2022, algo que muy pocos países han instaurado hasta ahora.
"Yo esperaba que no llegaríamos a eso, sobre todo ahora que tenemos la vacuna. Es dramático", opinó Andreas Schneider, economista belga de 31 años que trabaja en Viena, y que habló justo después de los anuncios el viernes del gobierno austriaco.
La reacción no se hizo esperar: la tarde del sábado, unas 40.000 personas marcharon por las calles de Viena al grito de "dictadura", convocados por el partido de extrema derecha FPO.
Al día siguiente, en la ciudad norteña de Linz se produjo también una movilización de miles de manifestantes.
En otras partes de Europa, que vuelve a ser el epicentro de la epidemia de covid-19, también sube el número de contaminaciones, vuelven las restricciones, y con ellas las frustraciones y la rabia.
Holanda vivió el domingo su tercera noche seguida de protestas, con fuegos artificiales y vandalismo en las ciudades norteñas de Groningen y Leeuwarden, así como Enschede en el este y Tilburg en el sur.
Este lunes, el primer ministro holandés, Mark Rutte, calificó estos actos de "pura violencia", cometidos por "idiotas".
A su vez el ministro de Salud alemán instó a sus compatriotas a vacunarse "urgentemente". "Seguramente al final del invierno cada cual estará vacunado, curado o muerto" debido a la propagación de la variante Delta, "muy muy peligrosa", dijo.