Por lo que se presume que se agregarían parágrafos diciendo que el Gobierno Nacional podrá decretar las zonas, sin establecer mayores condiciones.

Sin embargo, ante la expectativa y la polémica que genera el tema, ya se han registrado voces de rechazo sobre dónde se podrían establecer las zonas. Una de ellas ha sido la del representante conservador, Jaime Lozada, quien también ha sido víctima del grupo guerrillero.

“Yo como representante a la Cámara y como víctima de las Farc  -estuve tres años secuestrado, mi padre fue asesinado por las Farc, mi madre estuvo ocho años secuestrada, mi hermano estuvo tres años secuestrado-, por supuesto que no quiero que haya zonas de concentración en el departamento del Huila”, afirma Lozada.

El representante quiere que se dé información clara sobre cómo serán estos espacios y dónde serán ubicados, por lo que le comentó su duda al ministro del Posconflicto, Rafael Pardo.

Sin embargo, ante el cuestionamiento que realizó Lozada, la representante Ángela María Robledo señaló que el ministro no podría responder, pues la que establecerá eso será comisión tripartita conformada por el Gobierno Nacional, las Farc y el componente internacional -Misión de la ONU y Celac-.

“Esta respuesta no la puede dar el ministro Pardo. Este es un punto de negociación y de bilateralidad entre el gobierno nacional y las Farc. Pero, así como usted dice que en estos lugares no se generen estos territorios de repliegue de las Farc, hay muchas organizaciones en estas veedurías sociales que nosotros hacemos de indígenas, de campesinos y de población afro, que consideran que podrían estar en estos lugares”, le respondió Robledo a su homólogo.

Para la congresista, aunque es válido el debate se debe esperar a que la comisión se pronuncie: “Habrá qué mirar cuál es el mecanismo de selección que se va a establecer. También hemos escuchado de parte de algunas comunidades indígenas del Cauca que tienen reticencias y a mí me parece lícito que lo pongamos sobre la mesa, pero lo que quiero decir es que está bien el debate, pero esto no lo vamos a decidir nosotros”, agregó.

Pese a ello, el director del Centro de Pensamiento y Seguimiento al Diálogo de Paz de la Universidad Nacional Alejo Vargas, señala que es importante la comunicación con las comunidades para establecer dichas zonas.

“Obviamente las zonas de concentración no se podrán hacer en Marte o en la Luna, hay que hacer las aquí en el territorio. Lo que pasa es que en cualquier caso sí me parece que es razonable que se converse con las poblaciones locales y se acuerde exactamente los procedimientos, porque yo creo que en eso lo más preocupante es que les vayan a establecer zonas de concentración sin que ellos sepan cuáles son las reglas con las que va a funcionar”, afirma.

Mientras tanto, a la espera de conocer cuál será la propuesta del Gobierno, congresistas como Angélica Lozano piensan, que las zonas deberían ser ubicadas donde se ha generado el conflicto por años.

“Yo no me imagino, no es posible llevar de un lado a otro personas de la guerrilla a concentrarse, entonces, si en este departamento no hay presencia guerrillera, pues es absurdo esperar que los lleven allá. Con seguridad la realidad de la guerra, la realidad de donde operan hoy en día, es el punto de partido para la ubicación”, dijo.

*La Opinión