Un derrame de crudo del oleoducto Caño Limón Coveñas, cuya causa aún era ayer materia de investigación por parte de las autoridades, se vertió al Caño Cinco, en la vereda Guachimán, zona rural del municipio de Tibú.
La emergencia ambiental se originó en el kilómetro 360+350 del citado oleoducto, generando contaminación en 300 metros lineales de suelo hasta llegar al mencionado caño, informó la Corporación Autónoma Regional para la Frontera Nororiental, Corponor.
Desde allí, la mancha de crudo se desplazó una distancia aproximada de 4.1 kilómetros, ubicando la cabeza de la mancha a una distancia de 10 kilómetros de la bocatoma del acueducto de Tibú, lo que ayer mantenía preocupadas a las autoridades de este municipio.
Cenit, la empresa de transporte de hidrocarburos, oleoductos, poliductos y gasoductos, filial del grupo Ecopetrol, informó que activó Plan de Emergencia y Contingencia (PEC) por pérdida de contención en el Oleoducto Caño Limón Coveñas.
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El evento, cuya causa es materia de investigación, está controlado y para su atención, como medidas preventivas, se instalaron dos puntos de control con aproximadamente 450 metros de barreras mecánicas en Caño Cinco y su desembocadura, y se pusieron otros 270 metros en la bocatoma del municipio (para impedir que la mancha de crudo avance y comprometa el agua para el consumo de los habitantes).
Cenit indicó que tan pronto se activó el plan de inmediato se informó al Consejo Municipal de Gestión del Riesgo de Desastres de Tibú sobre esta situación y las acciones del PEC. El Ejército Nacional adelanta operaciones en la zona para garantizar la seguridad del personal técnico que atenderá el evento.
“Corponor como autoridad ambiental en Norte de Santander, está haciendo el respectivo seguimiento al derrame de petróleo en el municipio de Tibú, ocasionado por la rotura del Oleoducto Caño Limón Coveñas, al paso por la vereda Guachimán. El equipo técnico de la Territorial Tibú, a la fecha, ha adelantado una visita de inspección en la bocatoma del acueducto y está a la espera de que el Ejército Nacional dé la respectiva autorización para que el personal de la Corporación pueda ingresar al punto donde se originó el derrame bajo condiciones de seguridad”, explicó el director general de la entidad ambiental, Rafael Humberto Camacho Carrillo.
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Ayer, al atardecer, Corponor comfirmó que en el área de la bocatoma del acueducto de Tibú no se evidencian trazas de hidrocarburo, lo que es prenda de garantía para que el servicio de acueducto no se vea interrumpido a la población.
Se espera que hoy se tengan plenas garantías para el ingreso de los técnicos al lugar de la emergencia, tras las inspecciones hechas por el Ejército.
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