La Defensoría del Pueblo alertó frente a un preocupante panorama en Colombia sobre la desnutrición que están sufriendo los niños, principalmente menores de cinco años y de la cual ya ha cobrado varias vidas.
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La entidad citó cifras del Instituto Nacional de Salud (INS), en donde se reportaron 233 muertes confirmadas por desnutrición aguda en menores de 5 años el año anterior en todo el territorio nacional.
Asimismo, se tienen 57 fallecimientos que se encuentran en objeto de estudio, lo cual podría aumentar la cifra de decesos hasta en 290 por causas asociadas a la desnutrición.
“En Colombia, el pleno disfrute de los derechos de niñas y niños pasa por el acceso y garantía efectiva de su seguridad alimentaria, máxime que son sujetos de especial protección constitucional, y ello no está precisamente ocurriendo”, afirmó el Defensor del Pueblo, Carlos Camargo Assis.
Sobre estas preocupantes cifras, el departamento con mayor número de muertes fue La Guajira, con 70; le siguieron Chocó, con 46; Cesar, con 23; Magdalena, con 20, y Antioquia, con 18.
Las cifras permiten inferir que más del 61% de los casos del país se concentró en esos cinco departamentos.
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Los casos de desnutrición aguda moderada y severa en el mismo rango de edad llegaron a 24.226 en el 2023, presentando un aumento del 14,29% en comparación con el 2022, cuando en el país hubo 21.195 casos; un promedio de 66 por día.
Se observa que los casos se concentraron en los estratos socioeconómicos 1 y 2, que representan el 92% del total.
Se observa, además, que del total de registros de desnutrición, el 26% correspondió a grupos étnicos, cuya mayor afectación se presentó en la población indígena de los pueblos Wayú (2223), Embera (457), Sikuani (420), Embera Katío (285), Embera Chamí (197), Arhuaco (147), Yukpa (141), Guayabero (84), Nasa (71) y Embera Dobida (69).
En ese sentido, el Defensor del Pueblo hizo un llamado al Gobierno y las entidades responsables para darle cumplimiento a la Resolución 2350 de 2020 y adoptar acciones y rutas que permitan lograr el eje transformador del derecho humano a la alimentación “atendiendo a lo consignado en el Plan Nacional de Desarrollo 2022-2026, en el que fue expuesta la importancia de lograr disponibilidad, acceso y medidas de adecuación para garantizar ese derecho”.
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“Necesitamos que nuestros llamados sean atendidos para que no mueran más niñas y niños por desnutrición. Es oportuno que la institucionalidad gubernamental en sus distintos niveles implemente planes integrales, cuyo fin radique en que los menores de edad no continúen siendo afectados por la inseguridad alimentaria”, señaló.
Camargo Assis insiste en que no es posible seguir naturalizando la vulneración del derecho a la alimentación de la niñez.
“Es necesario tomar medidas urgentes. Además, se debe tener en cuenta que es una realidad evidenciada en otros grupos etarios, en los que, según la Asociación de Bancos de Alimentos de Colombia, unos 15,3 millones de personas en el país usan estrategias para afrontar el hambre, como bajar la calidad de lo que comen, bajar el tamaño de las porciones y saltarse las comidas”.
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