De manera silenciosa y poco evidente, en los hogares se podrían estar generando gastos fantasmas. Estos consumos, que no se ven o no se sienten, podrían evitarse de tomar ciertas medidas y así aportar en esta crisis que se vive en el país por bajos niveles de agua.
Colombia está en alerta ante la posibilidad de un desabastecimiento de agua y energía. La falta de lluvias hace que hoy, el nivel de los embalses en el país sea del 28,54 %, según cifras de XM.
Fugas de agua o goteras además de dispositivos electrónicos conectados permanentemente generan un gasto denominado consumo ‘vampiro’, que podría evitarse en medio de esta crisis, que llevó al Gobierno Nacional a decretar Día Cívico para minimizar el consumo de estos servicios.
Sumado al gasto cotidiano del agua en los hogares, se calcula que el 70 % de la energía eléctrica consumida en Colombia es generada por centrales hidroeléctricas. Esto significa que una gran parte de la electricidad utilizada se produce utilizando el agua almacenada en embalses específicamente diseñados para este fin.
Por eso, en medio de esta emergencia, es vital que las familias tomen medidas que aporten en esta problemática. En los hogares, se producen consumos fantasma de agua y energía de los que muchas personas no se percatan.
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Consumo ‘vampiro’ de energía
En lo que respecta a la electricidad, los “consumos vampiro” se refieren al gasto de energía que realizan los dispositivos electrónicos y electrodomésticos que se ponen en modo de espera, apagados o están conectados aún sin ser utilizados.
Nelson Montoya, decano de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Manuela Beltrán, explica que “estos gastos vampiro pueden estar representando actualmente cerca del 10 % del total facturado mes a mes en los hogares colombianos”.
El ingeniero electrónico asegura que es muy fácil identificar y de esa forma desconectar los artículos que consumen de manera fantasma, “son el microondas, el cargador del celular o del computador que a veces las personas dejan conectado después de alcanzar la carga total, el televisor o cualquier equipo que se utilice con control remoto”.
Además, hay otro tipo de consumos que generarían gastos mayores, “se pueden encontrar conexiones defectuosas que se identifican porque huelen a quemado o a través del sonido, cuando conectamos un equipo y empieza a sonar como si hubiese un corto”.
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Consumo ‘vampiro’ de agua
Las filtraciones de agua pueden ser más comunes de lo que parecen. Javier Garzón, ingeniero en recursos hídricos de la Universidad Manuela Beltrán, recomienda “estar atento a las conexiones para identificar posibles fugas o goteras. Por ejemplo, un escape de agua en un sanitario puede generar el desperdicio diario de 100 litros de agua”.
Junto a esta situación, hay otros gastos de agua que podrían reducirse cambiando algunas prácticas. “Una ducha de 15 minutos puede representar el uso de 240 litros de agua. Si es de 10 minutos bajaría 160 litros de agua, pero si una persona se ducha en cinco minutos, solo utilizará entre 75 y 90 litros”, explica Garzón.
El lavado de la ropa también genera gastos que podrían ahorrarse. La primera recomendación es utilizar la lavadora con la carga completa y como lo explica el ingeniero de la UMB, “en el último ciclo de lavado se puede recuperar el agua con un balde y utilizarla en la siguiente lavada o para descargar los sanitarios”.
Finalmente, el experto confirmó que poner una botella con agua o arena en los sanitarios es una medida que también podría ayudar a ahorrar hasta un litro por descarga.
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