La Opinión
Suscríbete
Elecciones 2023 Elecciones 2023 mobile
Colombia
La verdad de Mancuso y Timochenko
Jefe de Farc pidió perdón por masacre de Murindó.
Image
Colprensa
Colprensa
Viernes, 23 de Octubre de 2020

Por la masacre de ocho líderes indígenas en Murindó, ocurrida en 1986, y otras violencias a las que la antigua guerrilla de las Farc sometió a pueblos étnicos durante el conflicto, este viernes hubo un acto de reconocimiento del ahora partido político durante el ‘Encuentro por la Verdad’ denominado ‘Pueblos Indígenas en Situación y Riesgo de Exterminio Físico y Cultural: Su Dignidad, Resistencia y Aportes a la Paz’.

En el primer caso, Erika, exintegrante de la otrora organización guerrillera reconoció que fue responsabilidad del Quinto Frente guerrillero y lo calificó como un error fatal. “La historia de Murindó fue horrible, lo peor que nos pudo haber pasado”, dijo y añadió que tal fue el temor que causaron los hombres armados que “nos tocó que los indígenas nos vieran y corrieran de miedo”.

Rodrigo Londoño, conocido como Timochenko y ahora líder del partido político Farc, por su parte, pidió perdón por las violaciones sexuales de las que fueron víctimas mujeres indígenas y aceptó que estas conductas cometidas durante el conflicto armado están dentro de los peores errores que tuvo el grupo guerrillero.

“Para mí es duro expresar a ustedes cuan equivocados estábamos cuando hacíamos una lectura única de los territorios donde desarrollábamos nuestro accionar político-militar”, confesó y añadió que el desarraigo, los desplazamientos, las muertes y los heridos, fueron hechos que si bien Londoño reconoció, también subrayó que lo más doloroso y abominable fueron los casos de violencia sexual que perpetraron los hombres que integraban las Farc.

Lea aquí:

Víctimas de Mancuso en jornada de conciliación

“A nombre de la organización les pido que algún día nos puedan perdonar, por los efectos negativos de una lucha que en sus inicios y su final la creíamos justa, comprometida, pero que desafortunadamente la forma como la desarrollamos, a través de la guerra y sus dinámicas, nos llevó a cometer estos execrables errores”, expresó.

¿Qué ocurrió en Murindó?

Aún en la memoria del pueblo indígena están los recuerdos en los que uno a uno, los antiguos guerrilleros fueron llamando a ocho líderes del Cabildo Indígena Murindó y, frente a los integrantes del pueblo Emberá, los asesinaron a sangre fría.  Los hombres armados irrumpieron en territorio indígena desestabilizando sus organizaciones e irrespetando a las autoridades. La voz corrió a lo largo de la cuenca del río Chageradó con la noticia de que los subversivos irían de comunidad en comunidad, y muchas familias huyeron hacia municipios como Río Sucio, Vigía del Fuerte, Bojayá e incluso hacia Panamá.

El del líder Pernía fue un crimen de Estado: Mancuso

Este viernes, el excomandante paramilitar Salvatore Mancuso reconoció el asesinato del líder emberá Kimy Pernía Domicó, ocurrido en el año 2001. El reconocimiento de su responsabilidad se dio en el marco del Encuentro por la Verdad y ante la hija de Kimy, Martha Cecilia Domicó, a través de un diálogo telefónico facilitado por la Comisión de la Verdad en el marco del Sexto Encuentro por la Verdad ‘Pueblos indígenas en situación y riesgo de exterminio físico y cultural: su dignidad, resistencias y aportes a la paz’. Luego de que Domicó se presentó como miembro de la comunidad biijdó, el exjefe paramilitar le dijo a la mujer que aprovechaba la oportunidad para pedirles perdón de “todo corazón por estos hechos que los han llenado de luto, de dolor y de sufrimiento con la muerte del líder indígena, el señor Kimy Pernía Domicó”.

Le puede interesar:

Timochenko rinde versión libre ante la JEP por reclutamiento de menores

De acuerdo con el exparamilitar, desde el grupo al margen de la ley nunca debieron tomar acciones en la guerra. “Les explicaré cómo fue mi vinculación al conflicto armado. Yo me equivoqué, pido perdón por ello, por mis acciones en el conflicto que nos ha afectado de tantas maneras”.Domicó le expresó a Mancuso: “Soy la hija de Kimy Pernía. Sí, escucho tus palabras, tu voz, ahora sí nos estamos comunicando. Qué bonito saber que nos estamos comunicando en este momento porque en 2007 estuve apenas en la audiencia y no pude hablar con usted directamente. Escuché su mensaje y pues yo aquí estoy esperando la respuesta”. La joven indígena le hizo varias preguntas sobre la muerte de su padre. “¡Cuántos años no hace desde el 2001! Yo quisiera que dijera la verdad de qué hicieron con mi papá o qué fue lo que pasó. ¿Quiénes fueron las personas responsables? Porque estuve hace un año en la conmemoración de mi papá y fue un dolor tan profundo para mí porque yo decía: yo no sé dónde está mi papá. ¿Qué hicieron con él? Me regalaron unos ramos de flores con ese dolor que tuvieron porque yo les dije: no sé ni a dónde llevar estas flores. Todo mi pueblo está ahora en este momento huérfano”.

El exjefe paramilitar agradeció a Domicó y resaltó que le duele lo que sucedido con los pueblos del alto Sinú y de toda Colombia. “Yo he querido desde un principio conversar con ustedes, pero desafortunadamente la Fiscalía General de la Nación en Justicia y Paz en un principio no nos permitía tener comunicación y encuentros directos de perdón y reconciliación y esclarecimiento de la verdad con las víctimas y con ustedes”.

Temas del Día