La importancia que ha tenido la epidemia causada por el coronavirus Covid-19 ha sido en gran parte por la difusión que le han dado los medios de comunicación y el seguimiento muy de cerca que se le ha estado haciendo con la divulgación en tiempo real del avance del virus desde cuando hizo su aparición en China.
Hay páginas de actualización que informan sobre el número de casos y países afectados; se vaticina que muy pronto se habrá convertido en una pandemia, lo cual significa que se habrá extendido ampliamente, sin que ello tenga implícito el concepto de gravedad de esta enfermedad emergente y a la cual vamos a tener que enfrentarnos en el ámbito local, en algún momento.
La otra cara de esta emergencia mundial es el esfuerzo que están haciendo las autoridades en varias partes del mundo, en lo relativo a las estrategias para detener la diseminación de la enfermedad.
Las investigaciones sobre medicamentos útiles para mitigar o mejorar la condición clínica de los afectados y si es posible evitar su deceso, están en fase experimental.
Otro asunto crucial es poder encontrar una vacuna que sea efectiva y que sirva para prevenir su futura repetición.
En este último aspecto la revista New England Journal Medicine, ha publicado en la edición de esta semana un artículo de Bill Gates, el mismo cofundador de la empresa de software Microsoft.
Él a nombre de la fundación que tiene con esposa Melinda, expresa desde su óptica unos muy importantes conceptos sobre el este asunto de preocupación mundial.
Ha escrito Gates: “En cualquier crisis, los líderes tienen dos responsabilidades igualmente importantes: resolver el problema de inmediato y evitar que vuelva a suceder. La pandemia de Covid-19 es un buen ejemplo. Necesitamos salvar vidas ahora y al mismo tiempo mejorar la forma en que respondemos a los brotes en general. El primer punto es más urgente, pero el segundo tiene consecuencias cruciales a largo plazo”.
También aboga por que los países con mayores recursos auxilien a los más pobres a prepararse para impedir la propagación del virus: “Al ayudar a los países africanos y del sur de Asia a prepararse ahora, podemos salvar vidas y ralentizar la circulación mundial del virus”.
Es precisa la participación de gobiernos y donantes para el desarrollo de las investigaciones que puedan rendir como resultado final la fabricación de vacunas efectivas y tratamientos antivirales eficaces.
“Los gobiernos deberán financiar la adquisición y distribución de vacunas a las poblaciones que las necesitan”. En este tipo de situaciones se pude presentar un sesgo a favor de algunos y perjuicio de otros, de tal manera que a juicio de este empresario y filántropo.Los gobiernos y la industria deberán llegar a un acuerdo: durante una pandemia, las vacunas y los antivirales no se pueden vender simplemente al mejor postor. Deben estar disponibles y se asequibles para personas que están en el centro del brote y que más las necesitan”
Este coronavirus que está hoy en boca de todos, nos dejará muchas enseñanzas médicas y lo económico, en ambos campos se está investigando y aprendiendo, pero es necesario como lo recalca el personaje citado que, haya solidaridad entre los países, además de inversión y esfuerzos.
jorgepabonl@yahoo.com
