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Bicentenarios cumplidos y venideros
Mi encargo fue el primero de esos eventos, el natalicio del Libertador.
Martes, 25 de Julio de 2023

Ayer lunes, en horas de la tarde, atendimos una invitación cordial de la que ahora se denomina Casa de Gobierno “La Bagatela”, en Villa del Rosario, con el fin de celebrar dos acontecimientos culturales importantes: 240 años del natalicio del Libertador y el bicentenario de la Batalla naval del Lago de Maracaibo, cuya flotilla en nuestra representación comandó el almirante José Prudencio Padilla.    

Mi encargo fue el primero de esos eventos, el natalicio del Libertador, sin incurrir en la explicación al estilo de los abogados Jesús María Henao y Gerardo Arrubla: todo perfecto, acartonado, sumisión a la Iglesia Católica y un Estado infalible. Si obviamos los datos biográficos del prócer, tomamos como punto de partida el año 1800 hasta lo que va corrido del presente siglo XXI, tenemos que en la primera década de dicho siglo -el 19- se presentaron dos bicentenarios anecdóticos y otro trascendental.  

Los dos primeros tienen que ver con el Libertador. 1. El 22 de enero de 2003, se dio el bicentenario del fallecimiento de doña María Teresa del Toro, su esposa. Luego de dos años de noviazgo y ocho meses de matrimonio murió de fiebre amarilla a los 21 años. Bolívar juró y cumplió la promesa de no volver a casarse.

El Libertador escogió muy bien sus palabras para la promesa, y por ello pudo tener otros enredos sentimentales, que no lo distrajeron de su preparación para la guerra ni durante la misma, sino que fue solaz para el guerrero. Por ejemplo, con su prima Fanny de Villars, en Francia, a la que le envió una carta famosa; con la francesa Anne Lenoit, una jovencita que vivía en Tenerife, Magdalena, donde aún está su tumba, romance que el periodista tenerifano o tenerifense Luis Roncallo Fandiño perpetuó en su novela “La siempre viva del Libertador”. 2. El 15 de agosto de 2005, fue el bicentenario del juramento que Simón Bolívar hizo en el Monte Sacro, en Roma, pues con tan solo 22 años jura liberar a Venezuela del dominio español. 3. El 20 de noviembre de 2009, bicentenario del Memorial de Agravios, documento escrito por Camilo Torres Tenorio, elaborado el 20 de noviembre de 1809.  

¿Qué otros bicentenarios hemos simplemente recordado o celebrado debidamente? La Patria Boba; la Reconquista española, con el eufemismo de Pacificación y su célebre Pacificador; el fusilamiento de los próceres y heroínas; la Batalla del Pantano de Vargas, el 25 de julio de 1819; la Batalla de Boyacá, el 07 de agosto de 1819; ll Congreso de Angostura, entre febrero de 1819 y julio de 1821; el Congreso de Villa del Rosario de 1821, donde se ratificó la creación de la Gran Colombia, cuyo nombre oficial es República de Colombia.   

 ¿Qué bicentenarios quedan pendientes?

1. Uno muy importante. El fallecimiento de Antonio Nariño, el 13 de diciembre de este año.

2. La noche septembrina, sobre el atentado al Libertador el 25 de septiembre de 1828.

3. La Convención de Ocaña, del 9 de abril de 1828

4. El decreto orgánico de la dictadura de Bolívar, del 27 de agosto de 1828

5. La muerte del Libertador

6. Extinción de la Gran Colombia y el análisis de la presidencia y vicepresidencia de Bolívar y Santander.

Estos bicentenarios pendientes son política pura, mecánica política y, además, odios y amores. Vale la pena este inventario, como hoja de ruta, porque ahí estaremos.  

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