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El Gran Santander
En el transcurrir de la unión, dependerá de las autoridades y dirigencia nortesantandereanas, el que sea equilibrado o proporcional el destino de las inversiones obtenidas; y no que quedemos como secundarios.
Viernes, 7 de Mayo de 2021

No podemos dejar pasar en forma inadvertida o indiferente la creación de la Región Administrativa y de Planificación -RAP, integrada por los Departamentos de Norte de Santander y Santander (del sur?) Al leer apartes del Documento Técnico de Soporte-DTS, presentado por los Señores Gobernadores al Senado de la República, se pueden apreciar laudables beneficios para la prosperidad integrada de esta región, denominada como “El Gran Santander”, destacándose el circuito multimodal y logístico, con 12 obras de infraestructura y de conectividad, el corredor turístico-histórico y el uso sostenible de Santurbán y Almorzadero. La unión puede ser muy provechosa porque en ciertas clasificaciones el Norte de Santander con el Sur, son antagónicas, por ejemplo, en empleo, en informalidad, en competitividad y en otros variados índices de desarrollo. De esta unión tenemos una esperanza, que es lograr o conseguir mayores recursos nacionales y analizar las causas diferenciales del avance de las capitales, de Bucaramanga respecto a Cúcuta.  

En el transcurrir de la unión, dependerá de las autoridades y dirigencia nortesantandereanas, el que sea equilibrado o proporcional el destino de las inversiones obtenidas; y no que quedemos como secundarios.

Un artículo en La Opinión del 24 de abril (2021) de Gerardo Raynaud, titulado “Cambiemos el nombre” en el cual transcribe un escrito de Justo Pastor Castellanos  de 1977, que dice: “Esta pesada cruz de subalternos con el nombre de Nortesantandereanos, es casi ya insoportable.  De nuestro Francisco de Paula Santander, ¿qué es el norte?¿ la cabeza del prócer? ¿la brújula del general?”

“El propio nombre de Norte de Santander implica la supeditación psicológica cuando ya nuestros vecinos se apropiaron de la denominación de Santander, santandereanos, dejándonos como premio de consolación, llamarnos ‘norteños’. No somos norte de nada, simplemente Norte del Sur. Carentes de autenticidad, prestándonos para que nos atropellen en los presupuestos multimillonarios de los cuales no nos arrojan sino migajas.”

Estas son apreciaciones del exsenador Pastor Castellanos, hace 45 años. Es otra cara de la moneda. Como ciudadano corriente y economista, tengo la fe y la esperanza que la Región Administrativa y de Planificación-RAP, tendrá beneficios para esta región fronteriza, en gran parte dependiendo de la fortaleza, conocimiento y habilidad o capacidad de negociación de los Gobernantes y la Bancada en el Congreso. El 30 de abril será la Audiencia en la Comisión del Senado y el 7 de mayo la votación, que preludiamos será de aprobación. Se desea evaluar los resultados en el año 2024. Bienvenidos vecinos hermanos.

Unidos podemos ser más fuertes.

(*) Economista. Numerario de la Academia de Historia de Norte de Santander

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