Un nuevo pedido de auxilio emitió la alcaldía de Cúcuta, ante el incremento de cultivos de uso ilícito en la zona rural, que hoy suman 3.800 hectáreas, según informó el secretario municipal de Desarrollo Económico y Social, Wilmar Cepeda.
El funcionario aseguró que actualmente se está pidiendo ayuda a los organismos internacionales para que se apoye la gestión ante el Gobierno Nacional para que el área rural de Cúcuta sea incluida en las Zomac (Zonas más afectadas por el conflicto).
“La zona rural, que es la puerta de entrada al Catatumbo, está fuera de todos los programas establecidos por el Gobierno Nacional para el posconflicto, a pesar de que en Palmarito, Banco de Arena, y otras zonas hay presencia de grupos armados, bacrim, y cultivos de uso ilícito”, dijo.
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Agregó que hay casos de proyectos presentados ante la Usaid, que han sido rechazados porque Cúcuta no es parte de las Zomac.
“Vamos a hablar con la OEA, que está muy preocupada por la situación (de orden público) en Palmarito, y con otros organismos internacionales que nos ayuden para que Cúcuta sea una verdadera zona de posconflicto”, comentó.
Si la situación resulta inmodificable, Cepeda propuso que, al menos, el municipio sea tenido en cuenta “en condiciones especiales, por todo lo que está sucediendo”.
“Estamos planteando proyectos ante la Agencia de Desarrollo Rural y otras entidades para que podamos avanzar, dado que la comunidad quiere sustituir voluntariamente los cultivos”, aseguró. “La comunidad no quiere desplazarse nuevamente del territorio, como ya nos sucedió hace algunos años, pero necesitamos que nos den una condición especial”.
Adicionalmente, señaló que se han recibido reportes por fuentes anónimas de amenazas contra líderes comunales de Palmarito, “por la presencia de grupos armados que piden que la fuerza pública se retire del lugar, y esto no va a suceder”.
“Vamos a tener a la fuerza pública pero también la inversión social”, puntualizó.