Para tener un jardín innovador y diferente no es necesario invertir grandes cantidades de dinero.
Así lo demostraron los trabajadores de Ecopetrol con su iniciativa de jardines innovadores de chatarra y material reciclable.
Durante nueve días, los colaboradores de la empresa petrolera unieron su esfuerzo e ingenio y crearon 9 jardines diferentes en las instalaciones de Caño Limón en la redoma San Mateo.
Hasta allí acudieron integrantes del Club de Jardinería de Cúcuta, que quedaron sorprendidos con los resultados obtenidos.
Alrededor de 100 plantas entre veraneras, durantas, clavellinas, chocolatas, miamis, agaves, pentas, cintas, pensamientos —entre otras especies ornamentales— fueron sembradas en novedosas macetas hechas con canecas, llantas, picas, tornillos, filtros de vehículos, extintores, timones de válvulas, botellas de plástico y otros desperdicios.
Los diseños
Los creadores de los jardines se inspiraron en las riquezas de la región y en su historia. De allí salieron el Ferrocarril de Cúcuta, las iguanas, Transportando Pensamientos, Tierra Viva, EcoBarí, Mirador Kishire, La Granja de Termo, SideBoom, y Jardines de Babilonia.
El Ferrocarril de Cúcuta se destaca porque sus vagones se hicieron con canecas donde se almacenaba combustible, las cuales fueron desempolvadas y reutilizadas.
El Mirador de Kishire es homenaje al trabajador petrolero, con una figura que empuja una carreta de veraneras hecha con picas, tubos y filtros.
Yolanda Rey de Colmenares, presidenta del Club de Jardinería San José de Cúcuta, expresó su admiración por la elaboración, materiales y texturas utilizadas en esta muestra y dijo que nunca había observado algo similar, por lo que invitó a los cucuteños a replicar esta iniciativa en otros lugares públicos y privados.
La Opinión