El sueño de Julio César Santiago Álvarez de convertirse en ingeniero mecatrónico se hará realidad.

Sus 416 puntos obtenidos en las pruebas Icfes le otorgaron un cupo para el programa Ser pilo paga, y además fue ganador del reconocimiento Andrés Bello y fue invitado a la noche de la excelencia del ministerio de Educación.

El estudiante del colegio Francisco José de Caldas de La Libertad se ha convertido en el orgullo de su colegio, familia y barrio.

Quienes lo conocen coinciden en afirmar que es un joven tímido, que hace cuatro años entendió que la mejor manera para ayudar a su humilde familia era estudiar tan fuerte hasta convertirse en el mejor.

El próximo año, Bucaramanga será su destino y la universidad Autónoma de Bucaramanga será su nueva casa. 

“Este es un sueño hecho realidad y el fruto de mucho esfuerzo y dedicación. El colegio tiene todo el mérito de lo que hoy he conseguido”, afirmó.

Además del reconocimiento nacional, la secretaría de Educación Municipal le dio ayer una nueva medalla, también le regalaron un portátil y una tablet como estímulo a sus capacidades.

Nancy Leonor Daza, rectora del colegio aseguró que desde hace cinco años se propusieron dejar de ser un colegio más en la ciudad. 

Por estar ubicados en La Libertad tenían el estigma de ser un colegio pobre, con estudiantes académicamente regulares, pero se hicieron conscientes de que a pesar de las dificultades que tenían podían hacen de estos jóvenes, personas ejemplares.

“El colegio se ha propuesto romper los círculos de pobreza en la ciudadela de La Libertad a través de la educación”, aseguró Santiago.

Además de este logro, aseguró la rectora, el colegio también ostenta el título de ser el colegio más lector el año pasado, en 2017 están a la espera de los resultados. Tienen estudiantes entre los finalistas del concurso ‘Leer es mi cuento’. Además el modelo educativo se ha convertido en ejemplo para otras instituciones de la ciudad.