Programar un brazo robótico, automatizar fresadoras industriales, convertir el agua en gas para poner a funcionar carros tipo Go-Kart, entre otras ideas, expusieron estudiantes de 11 colegios del área metropolitana de Cúcuta en la sexta feria industrial escolar.

No hay límites para la imaginación de los alumnos.

Unos 400 estudiantes forman parte del convenio que desarrolla la Universidad de Pamplona con estas instituciones educativas, a través del cual les brinda asesoría a los muchachos en sus proyectos y además les facilita el ingreso a la educación superior, una vez se gradúan como bachilleres. 

Los estudiantes del colegio Misael Pastrana Borrero diseñaron unos carros prototipo tipo Go-Kart, que funcionan en principio con piñón y cadena, pero que en articulación con la universidad buscan poner a funcionar con agua, con el proyecto que están desarrollando los estudiantes del cuarto semestre.

Eduardo Lemus, integrante del comité organizador, explicó que esta es la sexta edición de la feria que busca incentivar la creatividad y la mayor vinculación de los estudiantes con estas técnicas del conocimiento: instrumentación, control de procesos industriales, mantenimiento de maquinaria y equipos industriales, y robótica.

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En esta oportunidad los muchachos expusieron cada uno de los proyectos en el colegio José Eusebio Caro Inem.

Brian Harvey Mendoza, estudiante de undécimo del Inem, explicó que su proyecto se basa en la movilización de un brazo mecánico o cualquier otro elemento robótico desde el celular por medio de bluetooth.

“Este proyecto que he desarrollado con Arduino, una plataforma de prototipos electrónica de código abierto, es el principio básico para procesos robóticos más complejos que se emplean en grandes empresas”, dijo.

El estudiante sostuvo que tras involucrarse en el proyecto empezó a interesarse a estudiarlo a nivel profesional. “Es bueno que desde los colegios empiecen a enseñar a manejar estos procesos”, dijo.

La feria contó con la participación especial de Rafael Lemus, un estudiante de séptimo grado del colegio Los Próceres, de 13 años, el único de su edad y de su grado.

Él dijo que desde que tenía 9 años le interesó la tecnología y la electrónica. “Desarrollé un brazo mecánico que puedo mover y programar para que haga lo que quiero, y eso es maravilloso”, explicó. “Cuando este más grande quiero hacer grandes cosas”.

Los estudiantes del colegio Francisco de Sales, del grado undécimo, están trabajando desde el año pasado en el control numérico para maquinaria y equipos industriales.

En este caso, utilizaron una fresadora, la cual fue programada por ellos mismos para cortar a pulso y plasmar el dibujo vectorizado en el material.

“Es bueno tener la guía de los profesores en el colegio y la asesoría de los expertos de la universidad”, dijo el estudiante Brayan González. “Para los estudiantes de estos colegios el convenio es una alternativa de superación de excelente calidad”.