Giselle Geney está expectante para que llegue el martes 9 de febrero. Ese día la cucuteña sabrá si el cortometraje ‘3 pies’ quedará entre los pre-nominados a los Premios Óscar.

No es un camino fácil, pero emprendió el vuelo desde que se inscribió en la lista.“Este privilegio es consecuencia de un premio que recibimos el año pasado en Nueva York, en el festival ‘New York International Childrens Film Festival (NYICFF)’. El gran premio del jurado es que otorga la posibilidad de la inscripción (que se conoce también como un Óscar Qualifier). Los pre-nominados son  10 cortometrajes seleccionados por la Academia, y a partir de ahí, se eligen los cinco nominados, durante  marzo.

Giselle es una cucuteña que estudió en el colegio Santa Teresa. Hija del cocinero Julio César Geney y de la ingeniera química y especializada en comercio exterior, Martha Celis. Y junto a su hermano el médico César recibe el apoyo “en mis emprendimientos artísticos”.

 En Pamplona pasó una parte muy feliz de su infancia y adolescencia. “Desde los 10 hasta los 15 años viajaba a Pamplona con mi hermano a compartir con mi tío Avelino Carrillo, sacerdote, y mi tía Carmen Carrillo, quien es como mi segunda mamá”.

El teatro fue “el primer amor de mi vida artística. Tuve la suerte de tener una profesora  muy inspiradora: Diana Flores, apenas unos 8 años mayor que nosotras en el colegio. Nos emocionó muchísimo con su pasión y dedicación. Después de que ella siguió con su vida profesional y en el colegio descontinuaron las clases de teatro, un pequeño grupo de amigas decidió continuar con la tarea. Y comenzamos a escribir, dirigir y actuar en nuestras propias obras”.

Le encanta contar historias, ser una líder inventiva y “sobre todo, la creación colectiva, así que de ahí viene mi conexión de corazón con el cine”.

Es realizadora de cine de la Universidad Nacional de Colombia, y “muchos de los lazos con los colaboradores y amigos de la película están arraigados desde la época de la universidad. Emigré a Bogotá para cumplir con el sueño de hacer cine, apoyada por mis padres totalmente”.

Sus primeros trabajos fue hacer reportajes documentales con niños y niñas de los colegios públicos de Bogotá para Canal Capital y la secretaría de Educación  durante cinco años. “Allí me empecé a enamorar del proceso de realizar  audiovisual con infancia”.

Pasó muchas horas escuchando, grabando y contando historias desde el punto de vista de los niños y sobre su vida en el colegio. “Durante este proceso, había un pensamiento que nunca podía quitarme de la cabeza: ¡los niños resuelven muchísimos problemas por sí mismos durante el horario escolar! ¡Son tan independientes y resilientes! Esa experiencia laboral tan maravillosa me remitió a mi infancia y recordé uno de mis mayores desafíos: ser una niña juguetona, enérgica y creativa, quien, además tenía que cumplir con el requerimiento de mantener el uniforme escolar limpio (un desafío que no pude lograr el 99% del tiempo)”.

En 2015 hizo un diplomado  en contenidos audiovisuales para el público infantil en Cali. Allá conoció a su  gran socia y productora Natalia Bernal, “con quien co-dirigimos la empresa Pescadito Films, enfocada a realizar producciones con niños para niños, teniendo en cuenta su punto de vista en cada parte de los procesos de una forma participativa, colectiva y pedagógica”.

‘3 pies’ es un cortometraje sobre el intrépido viaje de Gonzalo, un tenaz niño pamplonés amante del fútbol, quien se enfrenta a la tarea más difícil de su vida: llegar al colegio con los zapatos limpios. En el rodaje contaron con la colaboración de la Corporación Fronteras Films como equipo técnico y su trabajo de campo en la región..

 La cucuteña admite que no es fácil ser mujer líder de equipo en el mundo audiovisual. “Eso es algo que nos enorgullece del equipo de trabajo que tenemos con Natalia. Porque, por lo menos en mi caso, de lo más difícil  que tuve que enfrentar en mi vida profesional, fue el machismo, la disparidad de cargas y salarial. Ya, poco a poco se está tomando más conciencia”.

Giselle Geney y Natalia Bernal esperan llegar con los zapatos limpios a los premios más codiciados: los  Óscar.