En medio de la tragedia por el bárbaro ajusticiamiento de dos adolescentes en Tibú, el Catatumbo volvió a ser mencionado, pero en asuntos que apuntan- precisamente- a mejorar sus condiciones sociales en términos de garantía de derechos como el de la educación para los niños y jóvenes.

La sorpresa proviene de la cantante Shakira quien anticipó que por intermedio de su fundación Pies Descalzos construirá una institución educativa para esa convulsionada región de Norte de Santander.

Y es que además, en esta semana, el multimillonario y filántropo estadounidense, Howard Buffett, recibió la nacionalidad colombiana precisamente por las donaciones que ha hecho para el país, entre ellas una muy importante para la red vial del Catatumbo.

Su empatía con esta región y el proceso de paz ha sido tan fuerte, que hasta usa unas botas confeccionadas en esa zona por excombatientes de las Farc que firmaron el Acuerdo con el Gobierno Nacional, las cuales lució en su visita a La Gabarra, en enero del año pasado.

Precisamente cuando se le confirió la nacionalidad  y la Gran Cruz en la Orden del Mérito, se hizo referencia a su donación de 46 millones de dólares para el fortalecimiento de la red vial, entre la que se encuentra  la Troncal del Catatumbo.

Y aunque lógicamente no se debe de olvidar y debe haber investigaciones, acciones y consecuencias por lo sucedido esta semana con el horrendo crimen en que la justicia fue tomada por mano de organizaciones armadas ilegales presentes en el área, lo importante es que Buffett y ahora Shakira tienen al Catatumbo en su portafolio de acciones benéficas con miras a enfrentar la desigualdad social, que es la madre de muchos de sus problemas.

Precisamente, la afamada cantante de talla mundial ha dicho que “invertir en educación es lo que puede romper las cadenas de la pobreza y combatir la violencia”, filosofía que encaja perfectamente  en esta región nortesantandereana.

Debemos recordar que a Buffett y Shakira los une esa misma misión, por cuanto el multimillonario ha hecho aportes a Pies Descalzos para el desarrollo de las acciones para el fortalecimiento de la capacidad de cobertura del sector educativo en otras partes del país.

“Ahora estamos trabajando juntos una vez más en un proyecto más grande, entregando educación de calidad en el Catatumbo, una de las zonas más complicadas y vulnerables de mi país”, es la buena nueva entregada por Shakira.

Determinaciones de esta naturaleza emprendidas por estrellas rutilantes de la farándula como la cantante barranquillera y por personajes como Buffett, llevan el mensaje de que los proyectos para romper la inequidad, cerrar las brechas y satisfacer necesidades básicas insatisfechas, constituyen la solución a graves y diversos problemas.

En zonas vulnerables de Cartagena, Barranquilla y otros lugares del país, Pies Descalzos ha levantado megacolegios, con el propósito precisamente de proteger de peligros como el reclutamiento forzoso, la delincuencia y el microtráfico   a miles de niños pobres que desde la educación comienzan a construir proyectos de vida alejados de esa criminalidad que asecha.

Muy bien por Shakira. Muy bien por el ahora colombiano Howard Buffett, por la historia que empezaron a escribir para el Catatumbo, pero hay insistir en que el Estado tiene que fortalecer su presencia -que no es solamente la de Ejército y Policía- porque allí existe una gigantesca deuda social por saldar, que ayude a cauterizar las heridas de un incesante conflicto armado que solo ha dejado miedo, muerte, desplazamiento, pobreza y economías ilegales que alimentan el monstruo de la guerra.