La Opinión
Suscríbete
Elecciones 2023 Elecciones 2023 mobile
Editorial
Las aves, una opción
Ambientalistas de Arboledas, Mutiscua y Cúcuta buscan consolidar el avistamiento de aves como una alternativa económica para los pueblos. 
Jueves, 30 de Mayo de 2019

Todos los nortesantandereanos lo sabemos: somos una región muy rica en especies de aves nativas, además de ruta de paso de aves migratorias entre el sur y el norte del Continente. Pero solamente hasta ahora algunos estamos haciendo conciencia sobre el significado de esa situación privilegiada.

Grupos aislados de ambientalistas de Arboledas, Mutiscua y Cúcuta vienen desarrollando una labor intensa en busca de consolidar el avistamiento de aves en su hábitat natural, como una alternativa económica para los pueblos en particular y la región en general.

Hace tres semanas, por ejemplo, en Arboledas, los ambientalistas locales no solo se dedicaron a crear conciencia sobre la presencia de decenas de especies poco conocidas de aves y a organizar brigadas de vecinos para salir a los bosques de la localidad a buscarlas y registrarlas, sino que convocaron una elección para escoger el ave símbolo del pueblo. El ganador fue el toche pico de plata, un precioso pájaro rojo de alas negras y pico plateado.

La iniciativa, que puede ser imitada por los 40 municipios del departamento, parece un primer paso firme en busca de fortalecer una actividad sana, de apego a la naturaleza, que, bien organizada y apoyada por todos los estamentos regionales, puede convertirse en el motor de una actividad turística sin precedentes: la que en el mundo entero lleva a miles y miles, quizás millones de personas, a recorrer todos los países posibles, en busca de pájaros que no conocen.

Se les conoce como avistadores de aves, y su objetivo es registrar en fotos y en una libreta, cada ave que van conociendo, y luego compartir sus descubrimientos en grupos de aficionados del mundo entero a través de la internet.

Se calcula que cada uno de estos turistas deja un promedio de 200 dólares estadounidenses al día en los lugares que visita, y donde permanece varios días en los cuales sale a los bosques a buscar las aves, fotografiarlas, grabarles sus cantos y describir sus características. Y así, una por una, en jornadas de largas horas.

De ordinario, los pájaros están lejos de las ciudades, cerca de los pueblos, y Norte de Santander, un departamento de pocas urbes, es ideal para desarrollar este tipo de actividades. Son necesarios hoteles, restaurantes, empresas de transporte, tiendas de fotografía, agencias de guías y expertos, servicios de primeros auxilios… y nada más.

Hay que aprovechar que Colombia tiene más aves que cualquier otro país del planeta. Los científicos hablan de entre 1.920 y 1.940 especies diferentes, entre las cuales hay al menos 10 que solamente se encuentran en nuestro territorio.

Es este un momento que ni mandado a hacer para que el gobierno regional y los gobiernos locales analicen la posibilidad de enfocar recursos de todo tipo hacia la organización y consolidación de una industria novedosa, limpia, amigable con el medioambiente, que puede depararles a todos los nortesantandereanos una buena fuente de ingresos. ¿Por qué no?

Es cuestión de decisión y de aprovechar las oportunidades que ofrecen, por un lado la naturaleza, y por otro la afición de centenares de miles de personas que están dispuestas, en muchos casos, a gastar lo que sea con tal de fotografiar un ave en su hábitat natural. Solo con eso quedan satisfechos. Y solo por esto habría miles que también vendrían…

Temas del Día