La Opinión
Suscríbete
Elecciones 2023 Elecciones 2023 mobile
Editorial
Purga de EPS
Que el Gobierno cierre y siga cerrando EPS por su desastroso manejo y funcionamiento puede ser razonable.
Image
La opinión
La Opinión
Domingo, 20 de Octubre de 2019

El Sistema de Seguridad Social Integral vigente en Colombia fue instituido por la Ley 100 de 1993 y reúne de manera coordinada un conjunto de entidades, normas y procedimientos a los que pueden tener acceso las personas y la comunidad con el fin principal de garantizar una calidad de vida que esté acorde con la dignidad humana. 

Hace parte del Sistema de Protección Social junto con políticas, normas y procedimientos de protección laboral y asistencia social.

Comprende este Sistema las obligaciones del Estado y la sociedad, las instituciones y los recursos destinados a garantizar la cobertura de las prestaciones de carácter económico, de salud y de servicios complementarios, incorporados en esa mima Ley 100 y en otras normas.

La Seguridad Social es un servicio público obligatorio, cuya dirección, coordinación y control está a cargo del Estado y es prestado por entidades públicas y privadas. Debe evitar desequilibrios económicos y sociales que, de no resolverse, significarían la reducción o la pérdida de los ingresos a causa de contingencias como la enfermedad, los accidentes, la maternidad o el desempleo, entre otras. 

Los anteriores son los principales enunciados teóricos y filosóficos que definen nuestro  Sistema de Seguridad Social. 

En 1994 – hace 25 años – comenzaron a conformarse las Empresas Prestadoras de Salud (EPS). Iniciaron operaciones formalmente las primeras cuatro EPS, y luego se les sumarían otras dos con la fusión de varias de las llamadas prepagadas.

Para el 2012, ya en el país estaban operando 70 EPS en los regímenes contributivo y subsidiado, establecidos por la Ley. 

La falta de una adecuada administración, como lo reconocen voceros de la Superintendencia Nacional de Salud y de las mismas EPS, ha llevado a que en la actualidad queden solo 41entidades de este tipo,

En los últimos siete años, 18 EPS fueron liquidadas y sus usuarios trasladados a otras que siguen operando. Cuatro fueron revocadas totalmente, tres en forma parcial, 15 se encuentran bajo vigilancia especial y 19 funcionan sin ningún problema.

Las cuatro liquidadas atendían a 2,7 millones de usuarios que deben ser reubicados en los próximos quince días.  

Las quejas y reclamos de la comunidad a las EPS es porque no prestan un buen y oportuno servicio a los usuarios, las citas se demoran y no se cumplen, y no se entregan en forma oportuna los medicamentos que se les formulan a los pacientes. 

Con las EPS no se han podido terminar los llamados “paseos de la muerte” y por culpa de sus fallas e incumplimientos los despachos judiciales permanecen atiborrados de tutelas, derechos de petición y acciones populares de cumplimiento. 

Que el Gobierno cierre y siga cerrando EPS por su desastroso manejo y funcionamiento puede ser razonable, pero no parece la solución más adecuada, pues son miles y millones los enfermos que se quedan sin atención. 

En muchos casos resulta peor el remedio que la enfermedad, pues la reubicación no se hace en la forma más rápida y conveniente. El Gobierno del presidente Iván Duque ha impulsado su llamada “ley de punto final”, con la que se busca poner fin al desbarajuste económico y financiero que tiene postrada a muchas EPS y a sus usuarios en la cuerda floja. Esperemos que sirva de algo.

Temas del Día