Freddy Ortiz es colombiano retornado. Estuvo seis años viviendo en Maracaibo (Venezuela), donde emprendió un negocio familiar para comercializar comestibles para fiestas. Tras la crisis venezolana le tocó regresar al país sin nada. Hoy con el apoyo de World Vision International, la Cancillería de Colombia y la secretaría departamental de Frontera, retomó su negocio en Cúcuta.
Él forma parte del grupo de 50 microempresarios colombianos retornados, deportados y venezolanos que participó en la Feria microempresarial que organizó la Gobernación de Norte de Santander y Usaid, y que finaliza hoy en la plazoleta Fundadores.
Explicó el secretario de Fronteras, Juan Carlos Cortez, que estas familias son acompañadas con el apoyo de la cooperación internacional.
Y sostuvo que esta tipo de planes se quieren replicar en todo el departamento, pues en este venidero año van a trabajar en pasar de la ayuda humanitaria a la productividad. “Se quiere darle una estabilidad a este grupo de personas, sin dejar a un lado lo humanitario”, dijo.
Entre los emprendedores está Jorge Mora, colombiano que vivió en Barquisimeto más de 50 años. Desde hace dos décadas hace dulces tradicionales, y hace meses luego de retornar a Cúcuta fue apoyado para seguir en la ciudad su microempresa.
A través del Sena se les ofrecieron talleres de formación en administración de empresas. Hay emprendimientos de calzado, confección, dulces, pastelería, comida, entre otros.
El secretario de Frontera indicó que a través de las ferias de atención al ciudadano que se hicieron durante el año se dieron 8.300 servicios prestados en seis municipios.
Explicó que actualmente cuentan con unidades de atención en estos seis municipios, en las cuales se han atendido a más de 30 mil personas.