La falta de medicamentos en el seguro social; el colapso del hospital central de San Cristóbal; la falta de garantías para los pacientes en cuidados intensivos; la huida de médicos y enfermeras que imposibilita la atención a los pacientes de Táchira, empeoran la crisis de salud local, según afirmó la gobernadora Laidy Gómez.

Por ello, conminó al ministro de Salud de Venezuela, Luis López, a hacer frente a esta emergencia, sin importar si los enfermos son o no seguidores del gobierno.

“No estoy pidiendo salud para algún sector político”, dijo. “Sin pedir carnet de la patria, sin identificar su tendencia ideológica, hay que atenderlos porque se están muriendo pacientes que no pueden acceder a medicinas”.

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La mandataria señaló que están en riesgo las vidas de 220 venezolanos en el hospital central, no solo de Táchira sino de estados como Zulia, en crisis por falta de luz.

“Tenemos la disposición de ayudar, pero necesitamos inversión”, dijo Gómez, quien requirió la acción del ministro, para que “se aparte del Psuv y se comporte como médico”, pues “los venezolanos están muriendo en hospitales del Estado”.