Pamplona dio uno de los primeros pasos en materia de salubridad y en busca del bienestar de la población al devolver a la frontera con Venezuela a 110 migrantes venezolanos que se encontraban en la ciudad en calidad de irregulares.
Estas personas, en su mayoría, se habían establecido desde hacía tiempo en el perímetro urbano y otras pretendían ingresar a la ciudad.
Figuraban familias compuestas hasta por seis y siete hijos pequeños, y sus padres estaban dedicados a pedir dinero, ventas informales de dulces y otros productos menores.
También se indicó por parte de las autoridades municipales que algunas de estas personas estaban comprometidas, al parecer, en el microtráfico, hurto a personas y prostitución.
“Ya era hora que un alcalde tomara esa medida, porque la ciudad estaba invadida de personas que en nada le aportaban y no tenían ningún tipo de identificación”, dijo una vecina del sector del coliseo cubierto Chepe Acero, sitio en donde llevan a los irregulares.
En las redes sociales los cometarios son positivos en torno a la decisión de las autoridades locales en controlar la presencia de migrantes indocumentados que hacen presencia en el parque Águeda Gallardo, Calle Real, sectores de los mercados públicos, Plazuela Almeyda y barrios de la periferia.
En la primera jornada y haciendo cumplir el decreto municipal, los irregulares fueron llevados al coliseo cubierto Chepe Acero, en donde los organismos de ayuda humanitaria les ofrecieron alimentos y refrigerios. Al promediar las 4:00 de la tarde fueron conducidos en dos buses y un camión hacía Cúcuta en donde los colocaron a disposición de Migración Colombia para que hiciera los trámites de entregarlos a las autoridades del vecino país.
El coordinador de la oficina de Gestión del Riesgo de Pamplona, Juan Carlos Santafé Chaustre, dijo que en la primera jornada de control se enviaron a la frontera 110 personas que estaban en Pamplona en calidad de irregulares.
El funcionario aclaró que estas acciones hacen parte de la aplicación de las recomendaciones y normas del gobierno nacional a través del Ministerio de Salud, la Gobernación de Norte de Santander y de la Alcaldía, en búsqueda de prevenir el coronavirus.
“Lo que estamos haciendo es tratando de salvaguardar la integridad del pueblo pamplonés”, afirmó.