Viernes, 19 de Agosto de 2011
Anualmente la mayor partida presupuestal se destina para el Ministerio de Defensa principalmente para el pie de fuerza y la lucha contra los grupos armados ilegales. En los últimos 10 años se han dirigido a este propósito más de $184 billones.
Anualmente la mayor partida presupuestal se destina para el Ministerio de Defensa principalmente para el pie de fuerza y la lucha contra los grupos armados ilegales. En los últimos 10 años se han dirigido a este propósito más de $184 billones.
Para la Corporación Nuevo Arco Iris esto significa que, en promedio, en los últimos 8 años 4,2% del presupuesto nacional anual se ha gastado en defensa y se ha duplicado el pie de fuerza.
“En el año 2002 el total de la fuerza pública en Colombia era más o menos 275.000 y hoy en día son 452.000, nosotros en este momento tenemos un ejército prácticamente igual al de Brasil a pesar de que somos 5 veces menos personas y tenemos 4 veces menos territorio”, explicó Ariel Ávila, coordinador del observatorio de conflicto de la Corporación.
Por su parte, el profesor de la Universidad Javeriana, Jorge Restrepo, sostiene que el gasto en la guerra es ineficiente porque estos recursos se podrían utilizar para generar un crecimiento económico, pero necesario para afrontar las amenazas que representan los grupos guerrilleros.
Sin embargo, Restrepo señala que así se acabara el conflicto no va a generar un espacio fiscal para invertir en otros sectores, pues “se iría a mantener un aparato de seguridad a nivel rurales, a atender los altísimos costos que supone la reincorporación a la vida civil de los guerrilleros desmovilizados y a atender los compromisos financieros que resulten de una negociación”.
Para Restrepo, los ahorros que puedan surgir de lograrse el fin de la guerra deben venir de un programa de reconversión, en el que las fuerzas militares no se dediquen a resolver los conflictos internos sino a prepararse para atender amenazas exteriores, a atender la lucha contra el narcotráfico y ejercer labores de paz.
Aunque el costo de la guerra se ha convertido en un freno de mano para la economía del país, los académicos reconocen que se han visto resultados que han generado una derrota estratégica de las guerrillas que es producto de lo que se ha invertido en los últimos 10 años en el conflicto.
El coordinador del observatorio del conflicto de la Corporación Nuevo Arco Iris, Ariel Ávila, reveló que desde el año 2008 las Farc han aumentado sus acciones armadas contra la población civil un 10%. “El año pasado en mayo las Farc hicieron 7,2 acciones militares por día, que es la cifra más alta desde el fin de los diálogos en el Caguán”, dijo Ávila. Según la Corporación, desde la muerte de `Raúl Reyes` las Farc cambiaron la estrategia militar, al punto que el año pasado el aumento de las acciones armadas fue del 14%, pero por hechos como la reelección presidencial y la emergencia a la salud no tuvieron la misma trascendencia.
Para la Corporación Nuevo Arco Iris esto significa que, en promedio, en los últimos 8 años 4,2% del presupuesto nacional anual se ha gastado en defensa y se ha duplicado el pie de fuerza.
“En el año 2002 el total de la fuerza pública en Colombia era más o menos 275.000 y hoy en día son 452.000, nosotros en este momento tenemos un ejército prácticamente igual al de Brasil a pesar de que somos 5 veces menos personas y tenemos 4 veces menos territorio”, explicó Ariel Ávila, coordinador del observatorio de conflicto de la Corporación.
Por su parte, el profesor de la Universidad Javeriana, Jorge Restrepo, sostiene que el gasto en la guerra es ineficiente porque estos recursos se podrían utilizar para generar un crecimiento económico, pero necesario para afrontar las amenazas que representan los grupos guerrilleros.
Sin embargo, Restrepo señala que así se acabara el conflicto no va a generar un espacio fiscal para invertir en otros sectores, pues “se iría a mantener un aparato de seguridad a nivel rurales, a atender los altísimos costos que supone la reincorporación a la vida civil de los guerrilleros desmovilizados y a atender los compromisos financieros que resulten de una negociación”.
Para Restrepo, los ahorros que puedan surgir de lograrse el fin de la guerra deben venir de un programa de reconversión, en el que las fuerzas militares no se dediquen a resolver los conflictos internos sino a prepararse para atender amenazas exteriores, a atender la lucha contra el narcotráfico y ejercer labores de paz.
Aunque el costo de la guerra se ha convertido en un freno de mano para la economía del país, los académicos reconocen que se han visto resultados que han generado una derrota estratégica de las guerrillas que es producto de lo que se ha invertido en los últimos 10 años en el conflicto.
Anualmente las acciones armadas aumentan un 10%
El coordinador del observatorio del conflicto de la Corporación Nuevo Arco Iris, Ariel Ávila, reveló que desde el año 2008 las Farc han aumentado sus acciones armadas contra la población civil un 10%. “El año pasado en mayo las Farc hicieron 7,2 acciones militares por día, que es la cifra más alta desde el fin de los diálogos en el Caguán”, dijo Ávila. Según la Corporación, desde la muerte de `Raúl Reyes` las Farc cambiaron la estrategia militar, al punto que el año pasado el aumento de las acciones armadas fue del 14%, pero por hechos como la reelección presidencial y la emergencia a la salud no tuvieron la misma trascendencia.
