Aunque Jhon Fredy Castro Salazar alcanzó a burlarse de las autoridades durante más de un año, finalmente unidades del Grupo de Operaciones Especiales (Goes) lo detuvieron cuando salía de una cita médica en el barrio Quinta Oriental.

El capturado era uno de los delincuentes más buscados en Buenaventura, por el delito de acceso carnal abusivo con menor de 14 años, señalado de violar a una niña, aprovechando su cercanía con la víctima.

Cuando la Policía fue alertada por una fuente humana de que el sospechoso estaba alrededor del centro médico, de inmediato los uniformados se trasladaron al lugar para detenerlo y dejarlo a disposición de la Fiscalía.

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Cabe recordar que Castro figuró en el cartel de los más buscados revelado en julio por el ministro de Defensa, por lo que esta captura es considerada como un golpe importante, con el que se busca mitigar los riesgos de los menores de edad que puedan tener acercamientos con Castro.

El presunto delincuente fue presentado en audiencias concentradas de legalización de captura, imputación de cargos y medida de aseguramiento, en las que un juez decidió enviarlo a la cárcel, mientras continúa el proceso judicial en su contra.

Según las investigaciones, el capturado amenazaba a la víctima con el fin de que no lo denunciara y así poder pasar desapercibido.

La Policía busca garantizar la seguridad y el bienestar y la protección de los derechos fundamentales de los niños y adolescentes, por lo que le pidió a la comunidad que, en caso de conocer algún hecho delictivo contra esta población, de inmediato denuncie a través de la línea 123 o al número del cuadrante más cercano.

Otro hecho

Recientemente, unidades de la Sijín adscritas al grupo de la Fiscalía del Caivas, capturaron a Richard Aurelio Martínez Buitrago, quien presuntamente abusó sexualmente de un menor de 12 años.

La mamá de la víctima instauró la denuncia y los investigadores de inmediato iniciaron las pesquisas que arrojaron la orden de captura contra el agresor.

Según se conoció, el detenido aprovechaba la confianza que tenía con la familia de la víctima para poder cometer las aberraciones sexuales.

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