La ‘Operación Bemura’, desarrollada en Convención, Norte de Santander, por efectivos de la Policía y del Ejército resultó en la captura, mediante orden judicial, de Jeiner Hernández Serrano, más conocido como ‘Willi Mono’, de 27 años y oriundo de Valledupar, Cesar, señalado de ser integrante y explosivista del Ejército de Liberación Nacional (Eln).
De acuerdo con las autoridades, sobre ‘Willi Mono’, quien pertenecía a la compañía Capitán Francisco Bossio, pesaba una orden arresto emitida por el Juzgado Quinto de Ejecución de Penas y Medidas de Seguridad de Cúcuta.
“Según las investigaciones, era el explosivista en Convención. Encargado de la fabricación de artefactos explosivos improvisados, los cuales eran utilizados para atentar contra el oleoducto Caño Limón-Coveñas e infraestructura del departamento en los municipios Convención y El Carmen”, informó el Departamento de Policía de Norte de Santander (Denor).
La institución resaltó que Jeiner Hernández ingresó a ese grupo en 2013 como guerrillero raso, donde posteriormente pasó a delinquir con ‘Arbey’ en el sector Balcones, donde realizaba actividades de inteligencia y a la vez fungía como escolta.
“Para esa fecha delinquía con ‘Bigotes’, quien era cabecilla de finanzas de la compañía Capitán Francisco Bossio, donde ‘Willi Mono’ estaba encargado de recolectar las finanzas de la estructura y sus labores eran relacionadas con extorsiones en el sector”.
El Denor destacó que en 2014, este hombre participó en un atentado contra la infraestructura petrolera sobre la vía que conduce a La Mata, Cesar, y en 2016 se convirtió en cabecilla de las milicias, siendo destinado para comandar a 15 hombres en el sector Cartagenita.
“En el 2017 apoyó a personal de otras estructuras en Guamalito, participando en la acción terrorista contra una patrulla militar. En el 2018 y 2019 estaría en calidad de encuadrillado, encargándose de la logística para esa organización delincuencial”, añadió la Policía.
‘Willi Mono’ enfrenta cargos por fabricación, tráfico y porte de armas, municiones de uso restringido y privativo de las Fuerzas Armadas o explosivos.
Finalmente, subrayó que con esta captura lograron afectar la estructura de la compañía Capitán Francisco Bossio, reduciendo su capacidad para adelantar inteligencia delictiva en el área de injerencia, así como para planear y organizar atentados terroristas y afectaciones al personal de la Fuerza Pública.
