Desde hace cerca de seis meses, los familiares de Andrés Antonio Carrillo Rivero, quien falleció en un accidente de tránsito que se registró el 28 de julio del 2023, están sumidos en la tristeza, la insatisfacción y el dolor. Y todo porque aún no hay avances en el proceso jurídico en contra del supuesto conductor involucrado en el siniestro vial. 

Lea también: Cúcuta, la ciudad de la muerte en 2023

Aunque el supuesto conductor del carro Chevrolet Optra, de color negro, se presentó en la Fiscalía, 15 días después de que se registrara el lamentable hecho, para dar su versión de los hechos, aún no se han iniciado las audiencias y el caso está en proceso de indagación.

Se conoció que, al parecer, el hombre habría admitido que sí estaba conduciendo el vehículo, de placas venezolanas AC135KV, ese sábado en la madrugada, pero que en ese momento, tanto él como sus dos acompañantes, no estaban ebrios.

Cuando los familiares de Carrillo Rivero se enteraron de que esa persona se había presentado ante las autoridades, sintieron alegría y pensaron que se haría justicia, pero el gozo se transformó en insatisfacción y frustración, al notar que el caso nunca avanzó.

Por eso la familia contrató al abogado José Ernesto Jaimes Chía, que con su equipo de trabajo tratan de agilizar el proceso jurídico y obtener algún avance lo más pronto posible.

“Con el abogado vamos a demostrar que no fue un homicidio culposo, como lo quiere hacer ver uno de los presuntos involucrados, por el contrario, se establecerá  que se trató de un homicidio con dolo eventual, es decir, que hubo una irresponsabilidad, porque esa persona y sus acompañantes, huyeron del sitio y no fueron capaces de auxiliar a mi sobrino”, dijo el familiar.

El accidente mortal

A las 3:00 a. m., de ese sábado, Andrés Carrillo salió en su motocicleta Yamaha YBR, de color negro, con rumbo al Centro Comercial Bolívar para recoger a una prima. Cuando él iba por la avenida 11 con calle 26, del barrio Bellavista, fue embestido por el carro Chevrolet Optra.

Le puede interesar: La huella de la extorsión, tras el atentado con granada en Cúcuta

El hombre quedó tirado en el pavimento, boca abajo y a pocos metros de su moto, mientras que el conductor del otro vehículo emprendió la huida. La víctima falleció en el lugar de los hechos.

La unidad de criminalística de tránsito una vez conoció el hecho, se trasladó al sitio y luego de hacer la inspección técnica, revisó varias cámaras de seguridad de la zona y logró ubicar el carro, que fue abandonado en la calle 30 con avenida 13, de Bellavista, a unas pocas cuadras de donde ocurrió el accidente mortal.

Varias unidades de la Policía de Tránsito y familiares de la víctima llegaron hacia a las 9:00 de la mañana, del 29 de julio del año pasado, hasta el sitio donde el chofer dejó el carro Chevrolet Optra y luego de inspeccionarlo y ver que tenía las señales de ser el vehículo que arrolló a Andrés Carrillo: el vidrio panorámico partido, una farola rota y algunas latas dobladas, lo inmovilizaron.

Un joven con sueños

El tío de Andrés Carrillo lo recordó como una persona amable, que tenía el sueño de seguir estudiando sistemas.

“Él estudió en el Sena una técnica en sistemas, le gustaba mucho el tema de la tecnología. Nosotros aspirábamos que más adelante Andrés ingresara a una universidad”, dijo.

Gracias por valorar La Opinión Digital. Suscríbete y disfruta de todos los contenidos y beneficios en   https://bit.ly/SuscripcionesLaOpinion