Las imprudencias de las dos personas involucradas en un accidente de tránsito que se registró la noche del miércoles, frente al hospital Erasmo Meoz, causó la muerte de María Cristina Flórez Ovallos, quien intentaba cruzar la calle, cuando fue atropellada por una motocicleta.
Euri Enrique López Parada, quien conducía la moto Kawasaki KLR-650, de placa AH3E93G, no pudo esquivar a la mujer, de 56 años, en la avenida Guaimaral con calle 4N y finalmente la atropelló, generándole un trauma severo en el cráneo y la fractura de una pierna.
Las hipótesis que analizan las autoridades de tránsito sobre este mortal accidente es que Flórez cruzó la calle sin percatarse si venía un vehículo, mientras que el conductor de la motocicleta “no estuvo pendiente de los demás usuarios de la vía”.
Sin embargo, no se descarta un posible exceso de velocidad, razón por la cual continúan las investigaciones para esclarecer las causas del accidente.
Visitaba a su papá enfermo
Una familiar de María Cristina Flórez, recordó que su ser querido estaba visitando al papá, que está hospitalizado en el Erasmo Meoz, donde espera una cirugía de una pierna.
Según se conoció, la víctima arribó el domingo de Bucarasica, con su papá, de 77 años, que se encuentra enfermo.
“Ella estaba sola y salió con alguna compañera del piso, pero cuando fue a cruzar la calle se la llevó la moto. La arrastró mucho porque se partió la pierna en tres partes y también el cuello”, recordó la familiar de Flórez.
La víctima dejó once hijos. Vivía en una finca de Bucarasica, donde cumplía las labores del hogar.
“Al papá no le han dicho nada, porque lo van a operar por un problema que tiene con las venas. Le dijeron que ella tenía mucho dolor de cabeza y que por eso se había ido”, recordó la familiar.
Un menor de edad en Tibú
De otra parte, un aparatoso accidente de tránsito alteró la tranquilidad de los habitantes del barrio Santander, en Tibú, la tarde del pasado miércoles.
Juan Carlos Ropero García, de 12 años, murió cuando una volqueta le aplastó la cabeza mientras se movilizaba, al parecer, con su padrastro José Abel López en una motocicleta Suzuki GN, de placa ADX-395.
Según se conoció, López, quien conducía la moto, presuntamente intentó adelantar una volqueta de placas ZGO-051, conducida por el cucuteño Alberto Becerra Rojas, por lo que se acercó mucho y al hacer contacto perdió el control y cayeron de la moto, ocasionando que el vehículo de carga pasara por encima del menor.
