Al menos 12 personas murieron entre la noche del sábado y la madrugada del domingo en una serie de ataques a bares y centros nocturnos en el norteño estado mexicano Nuevo León. 
   
Fuentes oficiales señalaron que tres de los ataques fueron simultáneos y tienen relación entre sí. Además, la ola violenta dejó nueve personas heridas.
   
El mayor número de víctimas se dio en un bar del municipio Juárez, en donde seis personas perdieron la vida, cinco en el lugar y una más en el hospital.
   
Según testigos, al menos cinco personas llegaron a bordo de dos vehículos en ese lugar para agredir a las víctimas. 
   
"Los testigos refieren que llegaron varias personas en dos vehículos, y una de ellas entró al establecimiento para abrir fuego contra las víctimas", dijo una fuente policíaca a la AFP.
   
Los demás ataques tuvieron lugar en diferentes centros nocturnos de los municipios de Guadalupe y Monterrey.
   
La ola de violencia se inició la noche del sábado en dos bares del centro de Monterrey.
   
En otro incidente, dos personas fueron halladas ejecutadas en una camioneta del municipio de Cadereyta, ubicado en la periferia de la zona metropolitana de Monterrey.
   
Las autoridades no han informado si el hallazgo tiene relación con los ataques a los centros nocturnos.
   
Monterrey, un importante polo industrial en México y cercano a Estados Unidos, se ha visto azotado por la violencia del narcotráfico en los últimos años, en especial, producto de una disputa entre los anteriormente aliados cárteles del Golfo y Los Zetas.
   
México es golpeado por una ola de violencia ligada al narcotráfico. Desde diciembre de 2006, cuando el gobierno federal lanzó un polémico operativo militar antidrogas, suman más de 200.000 los asesinatos, aunque las cifras oficiales no detallan cuántos casos estarían ligados al crimen organizado.
   
Se registraron más de 25.000 homicidios dolosos en 2017, el año más violento desde que se inició el registro oficial, en 1997.