Uno de los lugares más frecuentados durante la temporada de fin y comienzos de año es el Complejo Histórico de San Francisco, en Ocaña, que guarda un embrujo especial en las páginas doradas de la hidalga villa de Caro.
Funciona allí el museo de la Gran Convención, la Biblioteca Pública Luis Eduardo Páez Courvel, la Academia de historia, el archivo histórico, escuelas de formación artística y la secretaría de Educación, Cultura y Turismo.
Vestigios históricos señalan que la construcción comenzó en el año de 1533 y culminó 50 años más tarde convirtiéndose en el primer claustro de las comunidades franciscanas dedicadas a la evangelización de los indígenas.
Los visitantes pueden apreciar el histórico templo en donde sonaron las voces de la Convención de Ocaña en el año de 1828 como epicentro de todas las miradas de los países de la Gran Colombia integrada por Venezuela, Nueva Granada, Ecuador y Panamá
En el año de 1937 este sitio fue declarado como Monumento de Interés Nacional.
*La Opinión