Una alianza entre Planeación, la Unidad Técnica Ambiental y Gestión del Riesgo de Ocaña, permitió que se estén haciendo controles urbanos a las construcciones para evitar contaminar las fuentes hídricas y mitigar riesgos.

En los operativos se están verificando las licencias de construcción y en caso tal que no la tengan, las obras son selladas con la intervención de la Policía.

“Después de la verificación que se hizo días atrás en los barrios Cañaveral, Primero de Mayo y Cristo Rey, fue sellada una obra”, dijo  Hugo Moreno, secretario de Planeación.

De acuerdo con el funcionario las personas tienen la creencia errónea de que los trámites de construcción son costosos y prefieren la ilegalidad. “Los invitamos para que se asesoren con el personal de Planeación”, acotó Moreno.

En el recorrido se apreció que uno de los fenómenos que más se presentan en Ocaña es construir en el filo de cerros, donde se excava sin ningún concepto técnico.

“No sabemos cómo son capaces de meter una máquina y escarbar una montaña debilitando el terreno. En estos casos nos dirigimos al sitio y hacemos recomendaciones, las cuales de no ser acatadas, pasan a sanción por parte del municipio”, dijo Moreno.

Una de ellas es que si cuentan con el permiso de Planeación, la excavación debe hacerse en forma de terraza para que el cerro no pierda estabilidad y afecte a viviendas en las partes bajas.

Los puntos donde es más común está práctica son los barrios Circunvalar, Santa Clara y Juan XXIII.

De acuerdo con el concepto técnico de Planeación, los sectores donde hay más peligro son la parte alta de Santa Cruz y frente al cementerio La Esperanza.

“En ningún sector urbano del municipio hay restricciones para construir, solo se requiere de hacer los trámites y recibir asesoría de personal calificado”, argumentó Moreno.