Diferentes líderes políticos, excompañeros y ciudadanos del común siguen homenajeando a la fallecida exsenadora Piedad Córdoba Ruiz, quien falleció de manera sorpresiva la tarde del sábado en Medellín, víctima de un infarto cardiaco.

Hasta el Salón de la Constitución llegaron los familiares de la senadora, amigos, algunos de los ministros del Gobierno y un buen número de congresistas. La ceremonia estuvo precedida por el presidente del Senado, Iván Name Vásquez.

El primer punto fue un riguroso minuto de silencio en honor a Córdoba. Seguido por un sentido canto y unas palabras por parte de un grupo de mujeres cantoras del Pacífico, quienes lucieron hermosos turbantes, como los que acostumbraba llevar la senadora.

Sobre el féretro de Córdoba, una gran foto en la que se le ve en vida luciendo un vestido tradicional de color verde y un turbante rojo y azul. Luego volvieron a sonar los tambores. Una de las mujeres envió un mensaje, en medio de lágrimas. “Nos quedamos sin representación, mujeres. A Piedad no le quedó grande defendernos sin distinción de raza. Gracias, Piedad”, dijo.

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Entre los asistentes al funeral se destacó la presencia de la vicepresidenta de la República, Francia Márquez; la ministra de Trabajo, Gloria Inés Ramírez, el ministro de Minas, Omar Andrés Camacho, y el exsenador Juan Luis Castro y Natalia Córdoba, hijos de la senadora.

La vicepresidenta del país, Francia Márquez, estuvo en el homenaje y aprovechó para destacar la trayectoria de la senadora Córdoba. “Como pueblo negro, como mujeres negras, pero como colombianos y colombianas, sentimos un dolor, porque aunque muchos en este país no reconocieron el liderazgo de Piedad Córdoba, el pueblo negro sí lo reconoce”, expresó.

“Hoy le damos gracias a Dios por todos sus consejos, pido un fuerte aplauso a la memoria y legado de Piedad Córdoba, que ningún niño, ni ninguna niña, olviden que una mujer negra ayudó a profundizar la democracia, y luchó por la paz y la dignidad de todos. Seguiremos llevando sus banderas, cueste lo que cuesta”, expresó Márquez.

Otro de los que se acercó al recinto fue el segundo vicepresidente del Senado de la República, Didier Lobo Chinchilla, quien dijo que era muy merecido el homenaje que la mesa directiva de la corporación brindaba a “a nuestra amiga Piedad Córdoba”.

“Tuvimos la oportunidad de compartir en vida en la Comisión de Ordenamiento Territorial, con quien construimos una relación de amistad cordial y sincera, independientemente de las diferencias ideológicas”.

En medio del llanto también, el senador Jael Quiroga, dijo en diálogo con el Canal del Congreso, que Córdoba entregó toda su vida a la lucha, no solamente de la población afro, sino también para las mujeres y los sectores sociales.

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“Dio la lucha por la población LGBT en medio de un Congreso atrasado y cerrado a los avances. Estoy con el dolor de perder una amiga, una mujer corajuda. Ahora mismo no hay ninguna otra que trascienda el camino que hizo Piedad. El solo hecho de abrirse camino en un mundo de hombres y ser atacada, lo que hizo fue fortalecerla”, dijo la congresista y amiga de Córdoba.

Aida Avella, senadora por el Pacto Histórico, dijo que a Piedad Córdoba hay que recordarla como una verdadera luchadora por la paz, en donde cree que fue fundamental para la historia del país.

Avella también contó que la semana pasada había hablado con Córdoba y se consultaron sobre un problema que hay por la repartición de unas tierras en Riohacha. Y que, aunque supo que estaba un poco enferma, no pensaba que algo así iba a fallecer. “Me duele en el alma”, agregó la senadora del Pacto Histórico.  

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