No hay tiempo que perder y más en materia de finanzas, ese es el tiempo del gobierno de Gustavo Petro, el cual desde está preparando lo que será el articulado de la nueva reforma tributaria que llevará al Congreso de la República, prontamente.

El exministro de Hacienda, Minas y Agricultura, Juan Camilo Restrepo, sostuvo que el actual ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, le confirmó al medio económico ‘Primera Página’ que ya integró al interior de esa cartera un equipo de expertos que empiece a redactar el contenido de la reforma tributaria.

Dicha reforma la anunció el presidente de la República, Gustavo Petro, quien sostuvo que era necesario revisar la anterior reforma para modificar algunos artículos y así garantizarle más recursos a su gobierno para la inversión pública, en especial la social.

Restrepo sostuvo que la nueva reforma buscaría un efecto fiscal neutro resultante de bajarle el impuesto de renta a las sociedades y subirlo de manera equivalente en términos de recaudo a las personas naturales que ganen más de 10 salarios mínimos.

El articulado que se prepara señalaría, dice Restrepo, además que las personas naturales con este nivel de ingresos son pocas y, “por tanto, la elevación de sus tarifas tendrá que ser enorme para compensar la rebaja de las tasas marginales del 35% al 30% en que se está pensando para las sociedades”.

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El exministro considera que se abrirá el debate en cuatro frentes. El primero, dice “¿se justifica una nueva reforma tributaria solo después de un año de haber sido expedida la anterior?”.

Para el dirigente político, el segundo será “la aritmética esbozada por el gobierno de la neutralidad, o sea, lo que se sacrifica por el lado de las sociedades se compensa por el lado de las personas naturales, no implicará -casi que inexorablemente- aumentar fuertemente la presión fiscal sobre la clase media?”.

El tercer aspecto para Restrepo, es “el evidente decaimiento de la economía (que va en picada) se va a corregir mecánicamente bajándole los tributos a las sociedades y subiéndoselos a las personas naturales; o, más bien, el decaimiento económico que se percibe y cuyos síntomas empiezan a confirmar las cifras ,es algo más asociado a la pérdida de confianza del sector privado, a los frecuentes bandazos del gobierno, al permanente discurso anti sector , y , claro, a las tasas de interés?”

Por último considera que “todo lo anterior se va a arreglar con una nueva reforma tributaria que entre otras cosas(como sucede frecuentemente con este gobierno) ni siquiera está cuantificada ni se han estudiado sus complejos aspectos redistributivos, pero que si se lleva al Congreso en la legislatura próxima (como es la idea) hará congestionar aún más la ya saturada agenda parlamentaria?”.

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