Desde que en 2002 se dieron las primeras desmovilizaciones colectivas de grupos armados, surgió en Colombia la Agencia Colombiana para la Reintegración (ACR), que ha venido ayudando a estas personas en la construcción de un proyecto de vida con el que se involucren nuevamente a la sociedad civil.
En Norte de Santander se han desmovilizado 1.260 ciudadanos, en 30 municipios: 860 de las extintas AUC, 250 de las Farc y 150 del ELN, según informó Joshua Mitrotti, director general de la ACR, en su reciente visita a Cúcuta.
Según Mitrotti, más de 750 de ellos se acogieron al plan de reinserción, por medio del cual, los han ayudado y capacitado, a través del Servicio Nacional de Aprendiza (Sena) con el que se firmó un nuevo convenio de cooperación en 2013. (Lea también 10% de los desmovilizados reinciden en el delito)
Parte de esas ayudas se basan en la educación y la formación laboral, que conllevan posteriormente a la reinserción económica.
Dennis Cristal Barrera, coordinadora misional del Sena en Norte de Santander, sostuvo que el convenio con la ACR contempla el acceso a todos los programas, el fortalecimiento del conocimiento y la generación de empleo.
La funcionaria explicó que cuando cumplen el ciclo de reintegración, la ACR les hace entrega de recursos bajo el plan Capital Semilla; son entre 8 y 12 millones de pesos que recibe cada desmovilizado para que se conviertan en microempresarios. También agregó que hay una lista de 120 personas de la región que recibirán esta ayuda.
Cristal Barrera manifestó que los campos de formación en los que han involucrado a los beneficiarios son servicio al cliente, higiene y manipulación de alimentos, cocina, agroindustria, emprendimiento y planes de negocio y comercialización de productos y servicios. La población participante se encuentra en Cúcuta, Tibú y Ocaña.
Estrategia de inclusión
La coordinadora misional del Sena en Norte de Santander precisó que, según la Circular 159 del 23 de abril de 2008, el 20% de los cupos de la institución son asignados a la ACR para que inscriba a los participantes (exintegrantes de grupos armados) que cumplan los requisitos de ingreso sin procesos de selección.
Con esta estrategia de inclusión se ha incrementado de manera sostenida en los últimos años el acceso a niveles de formación titulada de los participantes, aseguró Barrera, y resaltó que esperan que con la firma de la terminación del conflicto la cifra de alumnos desmovilizados aumente considerablemente.
“La capacidad del Sena será la misma, solo que el trabajo se podrá desarrollar con el apoyo de la ACR, la cual les hace un acompañamiento psicosocial y los enruta para que ingresen a las áreas en las que tiene competencias para instruirse”, agregó.
De acuerdo con cifras aportadas por la ACR, hasta la fecha 764 desmovilizados en proceso de reintegración han accedido a capacitarse con el Sena, a tal punto, que el número de ofertas por nivel de formación es de 1.861, pues cada beneficiario puede acceder a más de una oferta de enseñanza.
Respecto a los grados de aprendizaje, la ACR detalló que se han formado cinco desmovilizados como auxiliares; 616, complementarios; 4, instruidos como operarios; 593, con estudio semi-calificado; 188, técnicos; 46, con estudio tecnológico; y 409, como transversal.
El año en el que más hubo ofertas tomadas por los exintegrantes de grupos armados fue el 2010 con 377.
