Las 25 máquinas de confección que estuvieron esperando ser usadas en un taller en el sector Floresta, en La Parada, por fin darán sus primeras puntadas en las telas. Con más de 100 personas arrancó un programa de emprendimiento y formación inclusivo para población retornada y vulnerable.

El proyecto, que llevaba año y medio aguardando su comienzo, busca lograr la formación y la cualificación de capacidades de la población retornada y en condición de vulnerabilidad de Villa del Rosario. Viene a apoyar a las comunidades de acogida.

Son 105 personas que se capacitarán con instructores del Sena. Serán seis meses de prácticas productivas para posteriormente hacer la inserción laboral en el sector de la moda, o puedan emprender su propia microempresa con apoyo de otras entidades.

Darwin Ramírez, retornado de Michelena estado Táchira, indicó que a pesar de la espera, ahora vale la pena ponerle todas las ganas al proyecto que los capacitará en un oficio. “Serán días de aprendizaje para que luego podamos emprender como independientes”, dijo.

Este es el primer proyecto piloto del programa Colombia nos une, de la Cancillería, y que será utilizado como modelo a seguir para implementarlo en otras ciudades receptoras de retornados.

Explicaron las autoridades que no solamente se busca que esta sea una posibilidad de actividad económica, sino que también sea una alternativa de articulación con las lógicas de desarrollo regionales.

En el programa participaron la Gobernación de Norte de Santander, la Alcaldía de Villa del Rosario, el Sena y la Organización Internacional para las Migraciones. 

El alcalde Pepe Ruiz precisó que inicialmente se tenía otra visión del proyecto, porque se quería montar una especie de taller, donde la gente estuviera allí trabajando; pero, no se concretó. 

Participan en este primer grupo 105 beneficiarios: 60 retornados y 45 personas en situación de vulnerabilidad.