El conflicto armado que se registra en algunos municipios de la zona del Catatumbo, Norte de Santander, prendió de nuevo las alarmas de los organismos de derechos humanos. El defensor regional del Pueblo, Diógenes Quintero Amaya, señaló que en el marco de la Ley de Atención a Víctimas se activaron las alertas tempranas.

En las últimas horas fueron evacuadas, vía aérea, a los 18 miembros de una misma familia de Hacarí, de la cual hacen parte un adulto mayor y siete menores de entre 5 y 17 años. Una vez fletado el helicóptero, las personas abandonaron la vivienda para evitar el accionar de los violentos.

Los afectados fueron transportados a Ocaña, donde se les está brindando atención humanitaria, a través del Centro Regional de Victimas y el Centro Zonal del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF).

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Quintero se mostró preocupado por la confrontación de los grupos que operan en la región y que vulnera los derechos humanos de los habitantes de la región. De acuerdo con voceros estatales, los miembros del grupo familiar evacuado serán alojados en un lugar que les brinde seguridad.

La ruta de atención 

Diógenes Quintero Amaya informó que una vez conocida la situación de riesgo ante las amenazas e intimidaciones se trazó la ruta de atención con la evacuación de la zona.

“Se activan las alertas tempranas donde se advierte sobre los riesgos de la población por los homicidios, retenciones, campos minados, desplazamientos y otros hechos victimizantes”, reiteró el funcionario.

Aseguró que las instituciones emprendieron acciones para mitigar riesgos y proteger a la población civil. “Nos corresponde el acompañamiento humanitario a las familias en las rutas y la atención del Estado. Se conoce desplazamiento intraveredal en Hacarí y La Playa de Belén”.

“Los enfrentamientos no han terminado y se agudiza cada vez más. La gente piensa que hay un desescalonamiento del conflicto, pero está latente. Y familias enteras sufren los efectos de la violencia”, agregó.

El defensor regional del Pueblo indicó que las alertas tempranas están vigentes en municipios como Hacarí, La Playa de Belén, Ábrego, San Calixto, Teorama y El Carmen, en donde se hace el acompañamiento a las familias y se orienta sobre la ruta de atención necesaria por parte de las instituciones del Estado.

Violencia latente 

Latente se encuentra el conflicto armado en la zona del Catatumbo a raíz de la disputa territorial de los grupos al margen de la ley como el Ejército Popular de Liberación (Epl) o Los Pelusos, el Ejército de Liberación Nacional (Eln) y disidencias de las desmovilizadas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc).

Esa confrontación ha generado muerte selectiva e instalación de campos minados, lo que obliga al desplazamiento forzado de los campesinos de la región.
 
El jueves de la semana anterior, en pleno casco urbano de Hacarí, fueron asesinados Ramón Emel Angarita y su hijo Jaime. El sábado anterior se presentó el tercer hecho violento, donde fue atacado Jean Carlos León, de 25 años. En ese mismo caso resultaron heridos Jeinis Quintero Peñaranda y Luis Ascanio Ortiz.

Los homicidios se suman las intimidaciones y amenazas en contra de familias desplazadas hacia el casco urbano.