Los familiares de los hermanos Fernando Antonio y Héctor Martínez Cuica, de 18 y 15 años respectivamente, aún no encuentran una explicación al macabro asesinato de sus seres queridos, que se registró a finales de enero en la vereda Encantados, de El Tarra.

Los dos cuerpos sin vida aparecieron a un costado de la carretera polvorienta, donde fueron descubiertos por los campesinos de la zona, que de inmediato alertaron a las autoridades del hecho.

Sin embargo, por razones de seguridad, la inspectora de Policía se encargó del levantamiento de los cadáveres para trasladarlos al Instituto de Medicina Legal.

Este miércoles, en Tibú, familiares y amigos de los hermanos Martínez les darán el último adiós, lamentando el doble homicidio.

¿Qué pasó?

Fernando y Héctor trabajaban raspando hojas de coca en una finca de El Tarra, pero vivían en Tibú.

Según se conoció, el fin de semana previo a su muerte, los dos hermanos se comunicaron con sus familiares y les aseguraron que irían a cobrar un dinero para poder irse a su casa y desde ese momento les perdieron el rastro, hasta la noticia del doble asesinato.

“Eran buenos muchachos. No sabíamos de problemas o amenazas, ellos solo iban a trabajar”, recordó una familiar de las víctimas.

Por ahora, se espera que las autoridades esclarezcan los móviles del doble asesinato y se identifiquen a los autores del hecho.

En esta zona delinquen el Ejército de Liberación Nacional (Eln) y la disidencia de las Farc.