¿Por qué es tan importante amamantar al bebé? Uno de los motivos es que la leche materna protege el estómago del pequeño.
Aquí les dejamos cinco razones:
1 La leche materna es de fácil digestión
La leche materna es el alimento natural perfecto que le dará al bebé el mejor comienzo en su vida. Es por eso que la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda amamantar exclusivamente durante los primeros 6 meses de vida y continuar hasta cuando sea posible, con beneficios, no sólo para el bebé sino para la mamá.
En la leche materna predominan nutrientes de fácil digestión que protegen el estómago del lactante.
2 Tiene todos los nutrientes necesarios para el adecuado crecimiento y su programación
Este alimento contiene todos los nutrientes como proteínas en cantidad justa sin excesos y con una calidad óptima que promueve un incremento de peso saludable con reducción del riesgo de sobrepeso-obesidad, grasas importantes para todas las células, para el desarrollo del cerebro y de la visión, carbohidratos, vitaminas, minerales necesarios para el crecimiento.
El contenido de la leche materna se adapta de manera precisa a las necesidades del lactante a través de sus etapas de crecimiento y desarrollo. Igualmente, el consumo de leche materna gracias a sus proteínas en cantidad justa y de excelente calidad, contribuye a disminuir las posibilidades de sufrir de enfermedades como diabetes, hipertensión y problemas cardíacos cuando ellos sean adultos.
La leche materna es el primer y mejor regalo que una madre puede darle a su hijo, es el mejor alimento para el bebé porque aporta todos los nutrientes que contribuyen con una vida saludable presente y futura.
3 Amamantar ayuda a reducir el riesgo de cáncer de seno y de ovario
Amamantar también favorece a la mamá. El cáncer dependiente de hormonas es el más frecuente en las mujeres. Sin embargo amamantar estimula la producción de hormonas protectoras para la madre, lo que previene esta enfermedad a largo plazo.
4 Madre e hijo crean vínculos a través de la lactancia
La lactancia ofrece la mejor oportunidad para crear contacto con el bebé. Es el espacio perfecto para tener un tiempo de calidad, relajarse y disfrutar del momento en su compañía. Este contacto es recomendado en las primeras semanas y se considera como uno de los medios que permite desarrollar vínculos y apoyar el proceso de lactancia materna.
5 Ayuda al desarrollo cognitivo y a la creación de defensas
Los últimos avances científicos han demostrado que los niños amamantados tienen un adecuado desarrollo del cerebro. La leche materna contiene probióticos que ayudan con el desarrollo del intestino, de la flora intestinal y de las defensas del bebé.
Y además, contiene otras sustancias que refuerzan las defensas lo que reduce la probabilidad de sufrir infecciones respiratorias y diarreas cuando están en la etapa infantil.
La Opinión
