La Opinión
Suscríbete
Elecciones 2023 Elecciones 2023 mobile
Columnistas
“Cesó la horrible noche”
Ahora que Cúcuta aprendió la lección de elegir un alcalde apolítico sin experiencia en administración pública, retomó la senda de la política, eligiendo un alcalde joven con experiencia, persistente
Miércoles, 20 de Diciembre de 2023

Parodiando la frase insertada en la primera estrofa del Himno Nacional de Colombia, termina el mandato, en mi opinión, de uno de los alcaldes más incompetentes que ha tenido nuestra capital, la del señor Jairo Tomás Yáñez Rodríguez.

Fueron cuatro años en que el “viejito del megáfono” como le decían, después de haber ilusionado a más de 110 mil cucuteños que votaron por él, hoy en día tiene a más de 700 mil alborozados de alegría pues por fin cesó la horrible noche.

Y eso que le faltó, palabras de él: “Más tiempo para trabajar por mi ciudad”. Quería terminar las plantas de tratamiento de aguas servidas de la ciudad, el Embalse Multipropósito del Cínera, la conexión del sistema de gas y el tren del Catatumbo, como algunos de sus proyectos “estratégicos”, que mantuvo siempre en mente y que ejecutaría si lo dejaran en el cargo hasta el 2050, estrategia de todos. Muy poco tiempo tuvo, por eso entrega la ciudad con serias deficiencias.

Dice haber ejecutado el 92% de su Plan de Desarrollo con una inversión de 5.8 billones de pesos en sus cuatro años en más de 500 obras, que, a decir verdad, no se ven. Bueno, una obra monumental que deja como legado es la disminución de las calzadas en el centro de Cúcuta, limitando el tráfico vehicular de cientos de carros diarios para abrirle paso a tres bicicletas que circulan por las ciclo-rutas.

También deja sin terminar los Corazones de Barrio, la avenida las Américas, las baterías sanitarias de los colegios, el Catastro Multipropósito, la remodelación del Malecón, los parques de la ciudad, con chicharrones por falta de planeación para que las resuelva el nuevo alcalde.

Lo rescatable de su gabinete, todo no puede ser malo, su director de Insalud doctor Juan Agustín Ramírez Montoya que logró recuperar en todas sus dimensiones a la empresa y su secretario de hacienda doctor Orlando Miranda por su integración con la comunidad y manejo eficiente de las finanzas 

Al nuevo alcalde le corresponde reconstruir la ciudad, que se sienta la autoridad, apoyar la recuperación del empleo, mejorar la percepción de seguridad, reparar la malla vial deteriorada casi en un 90 por ciento, con buena señalización, nombrar un buen director de tránsito que mejore el caos vehicular, meter en cintura la negligencia de los policías de tránsito, que no lo regulan en los trancones, pero si agazapados persiguiendo potenciales infractores.

Ahora que Cúcuta aprendió la lección de elegir un alcalde apolítico sin experiencia en administración pública, retomó la senda de la política, eligiendo un alcalde joven con experiencia, persistente, que, en los primeros asomos de su gabinete, muestra experimentados jóvenes que muy seguramente propiciarán un verdadero cambio de rumbo en nuestra maltrecha ciudad. Confiamos que así sea.  


Gracias por valorar La Opinión Digital. Suscríbete y disfruta de todos los contenidos y beneficios en: https://bit.ly/SuscripcionesLaOpinion

Temas del Día