La Opinión
Suscríbete
Elecciones 2023 Elecciones 2023 mobile
Frontera
La frontera, eje de la desaparición forzosa
En 2018, Norte de Santander fue el segundo departamento del país con el mayor número de denuncias ante la Fiscalía.
Image
La opinión
La Opinión
Jueves, 31 de Enero de 2019

Los sectores de Nuevo Escobal, San Faustino (Cúcuta), Puerto Santander y La Parada (Villa del Rosario), todos ubicados en el área metropolitana, siguen siendo los escenarios propicios para la desaparición forzada, los homicidios y la permanencia de grupos criminales.

Según la Fundación Progresar, la desaparición forzada sigue marcando la pauta y para 2018, Norte de Santander fue el segundo departamento, después de Antioquia con el mayor número de denuncias ante la Fiscalía de desapariciones forzadas en Colombia.

El 29 de diciembre de 2018 a las 4:30 de la tarde un nuevo caso de desaparición forzada ocurrió en el Nuevo Escobal, cuando Joe Walter Güiza Malpica y un conocido que lo acompañaba se dirigieron hacia Ureña pero en su ruta se perdió el rastro de los dos hombres de 36 años.

“Primero se trató de un secuestro”, afirmó una de sus familiares, “porque los tipos llamaron a pedir dinero: primero, $10 millones por cada uno, y después, $20 millones, por cada uno”.

Aunque intentaron negociar, “los tipos se perdieron después de las 11 de la noche”, y luego de enviarles fotografías en las que se veía a Güiza, arrodillado; a su amigo, fuertemente golpeado en el rostro, y ambos amarrados.

Güiza, técnico en reparación y mantenimiento de computadores, y su amigo, tecnólogo, solo cometieron un error: llegar a la frontera y toparse con criminales que tienen el dominio territorial del sector. 

Le puede interesar Protestas por desaparición de comerciante en frontera de Venezuela

“Hemos encontrado que en ese sector de Escobal, Nuevo Escobal y Ureña, desde hace muchos años ha estado en manos de la criminalidad”, señala Wilfredo Cañizares, director de la Fundación Progresar.

La trocha La Isla, una de las más conocidas, “siempre ha estado bajo control de alguien y nos ha llamado la atención, porque no es un secreto para nadie”, afirma el director, quien enfatiza en que por allí han pasado paramilitares, grandes contrabandistas, pero también, combos, de menos de cinco bandidos.

Según relatos de los vecinos, al parecer se estaría usando una casa abandonada para torturar personas, afirma Cañizares, desde la que se escuchan terribles gritos.

“Nos llama mucho la atención, por ejemplo, cómo este sector es utilizado para desaparecer personas”, agregó. “Es una cosa realmente macabra”, en un ciclo de eventos que casi siempre se vinculan a la Policía, bien por contubernio, bien por negligencia.

Sin embargo, la Policía Metropolitana de Cúcuta afirmó que en el sector hay personal tanto uniformado como encubierto, y sobre el caso en mención, afirmaron que se atendió y se esperan los resultados de las investigaciones.

Para Cañizares, la situación se torna más crítica al advertir que las desapariciones se han vuelto frecuentes en el área metropolitana, y ya ni siquiera responden a estructuras como las guerrillas, ni tienen carácter político, “sino que cualquier bandido desaparece en la frontera”, en absoluta impunidad. 

“Saben que nos les va a pasar nada y por eso actúan con tanta sevicia contra la gente”, dijo, y afirmó que “no hay derecho de que en Nuevo Escobal se permita la inacción de la autoridad”, lo cual favorece el “círculo de corrupción” que existe de lado y lado de la frontera.

Según datos de la Fiscalía, obtenidos por Progresar, en 2018 hubo 218 personas víctimas de desaparición forzada, entre ellos, 32 venezolanos. 

“Estamos seguros de que la gran mayoría de las desapariciones están ocurriendo en el área metropolitana”, aunque aún varios de los hechos se están indagando.

Temas del Día