En un demoledor mensaje a sus rivales para el Mundial de julio, Sydney McLaughlin batió su propio récord mundial de los 400 metros vallas al imponerse con un tiempo de 51.41 segundos en las pruebas de clasificación de Estados Unidos.
McLaughlin rebajó en cinco centésimas de segundo su anterior récord mundial de 51.46, que estableció al ganar el oro en los Juegos Olímpicos de Tokio el 4 de agosto del año pasado.
La estadounidense, de 22 años, se afianzó como gran favorita para el Mundial, que se disputará del 15 al 24 de julio, luego de su demoledora actuación en el mismo escenario de esa cita, el Hayward Field de Eugene (Oregón).
La segunda clasificada, Britton Wilson, cruzó la línea de meta a más de un segundo de McLaughlin, con 53.08 segundos, con Shamier Little en tercer lugar con 53.92.
Este trío representará a Estados Unidos en el Mundial junto a Dalilah Muhammad, clasificada automáticamente por ser la vigente campeona.
Muhammad, quien superó a McLaughlin en 2019 en Doha pero quedó tras ella en Tokio-2020, recibió una exención para eludir estas pruebas y enfocarse en la recuperación de su lesión de isquiotibiales.
Ausente Muhammad, McLaughlin no encontró rival el sábado sobre la pista del Hayward Field, donde un año atrás batió por primera vez el récord mundial.
"Cada vez que vengo aquí siento que va a ocurrir algo increíble. Esto es un gran indicador de dónde estamos", dijo la estadounidense sobre su nuevo récord. "Espero que volvamos a casa y trabajemos en algunas cosas e intentemos volver y mejorarlo", subrayó McLaughlin.
‘Felix no alcanza el boleto en 400 metros’
La exhibición de McLaughlin coronó una jornada en Eugene con 11 finales y la despedida de los campeonatos estadounidenses de la velocista Allyson Felix, 21 años después de su primera participación.
Felix, en su temporada de despedida a los 36 años, no logró ninguno de los boletos en los 400 metros al terminar en el sexto lugar con 51.24 segundos, pero aún podría competir en el Mundial si es seleccionada para los relevos.
"Creo que debería estar en buena posición para, quizás, los relevos mixtos o algo así", señaló Felix.
Su presencia en Eugene pondría el broche a una carrera que incluye 29 medallas mundiales y olímpicas, entre ellas siete oros olímpicos.
Talitha Diggs, de 19 años, se impuso en la prueba con 50.22, seguida de Kendall Ellis (50.35) y Lynna Irby (50.67).
En los 400 metros masculinos, Michael Norman consiguió una rotunda victoria con 43.56 segundos, el mejor tiempo de la temporada.
Champion Allison, campeón universitario en Estados Unidos, bajó por primera vez de los 44 segundos al ser segundo con 43.70, mientras que Randolph Ross fue tercero con 44.17.
En otras pruebas, la plusmarquista mundial Keni Harrison se impuso en los 100 metros vallas con 12.34 segundos, también mejor marca de la temporada.
Alaysha Johnson fue segunda en 12.35 y Alia Armstrong tercera en 12.47 en una final en que la campeona mundial, Nia Ali, optó por no participar.
Lyles arranca fuerte
En su turno el campeón mundial Noah Lyles logró el mejor tiempo (19.95 segundos) en las primeras series de los 200 metros, antes de revelar que se está recuperando de un contagio de COVID-19.
El velocista explicó que durante su participación a mediados de mes en la reunión de Nueva York sintió dolores musculares y fatiga que luego confirmó que se debían a un contagio de coronavirus.
Erriyon Knighton, quien posee el mejor tiempo de la temporada con 19.49, concluyó en segunda posición, con 20.08 segundos.
El actual campeón mundial de los 100 metros, Christian Coleman, pasó también a las semifinales con un tiempo de 20.13 pero mantiene la incógnita de si perseguirá el doblete 100-200 metros en el Mundial.
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