Una verdadera crisis estalló en las últimas horas al interior del Partido Conservador, luego de que un bloque de congresistas resolviera arrebatarle la presidencia de la colectividad al senador antioqueño Carlos Andrés Trujillo, quien había sido elegido para ese cargo en junio de 2022.

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Apelando a los estatutos del partido, los legisladores decidieron nombrar en su reemplazo al senador Efraín Cepeda, quien anteriormente ya había ocupado esa dignidad, y así se lo informaron a los miembros del Directorio Nacional, por medio de una carta.

“Habiendo sido dos veces presidente del Partido Conservador, presidente del Congreso de la República y con la mayor experiencia política en el Congreso, consideramos que el senador Efraín Cepeda Sanabria es la persona idónea para conducir nuestro curso político en este momento nacional”, manifestaron los firmantes del documento.

Las molestias con Trujillo comenzaron desde el momento en que selló la alianza con el presidente Gustavo Petro, comprometiendo al partido con el apoyo a diversos temas del nuevo gobierno. Algunos sectores azules también le reprochan al dirigente antioqueño el haber recogido la participación burocrática en la nueva administración.

Y es que aunque en su momento se habló de que el conservatismo tendría, como ha sido costumbre desde hace ya varios gobiernos, el control de todo el sector del transporte, lo cierto es que terminó cediendo terreno importante y el Ministerio, a cargo de Guillermo Reyes, más que representar a la tolda azul, se dice que es una cuota de Trujillo.

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Sobre el senador además pesa un nuevo cuestionamiento, porque el fin de semana pasado comprometió el apoyo del Partido Conservador en su departamento a la candidatura a la Gobernación del exsenador Julián Bedoya, quien tiene varios procesos judiciales en marcha.

En la carta que el bloque de congresistas le remitió al directorio señalan que si bien el saliente director de la colectividad “interpretó de manera adecuada y democrática la realidad política del país”, el proceso que se avecina requiere un vocero con una trayectoria reconocida.

“En aras de mantener la congruencia con nuestra colectividad y de cara al proceso electoral regional que se avecina, el cual es fundamental para nuestro partido, respondiendo de manera asertiva con los más altos niveles de responsabilidad y consenso, como directivas nacionales estimamos necesario que continuemos con un vocero con trayectoria nacional, con un liderazgo inspirador e incluyente”, dijeron.

Desde ya, la bancada fijo cuál debe ser el norte de Cepeda y anticipó que este será trabajar por recuperar la credibilidad del conservatismo y acompañar al Gobierno en los asuntos en que el partido esté realmente identificado.

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“Su misión, senador Cepeda, no es fácil, no son menores los retos y desafíos que afrontamos. Es el tiempo de reconectarnos con nuestras bases, con nuestros valores, siempre nuestra fortaleza política ha estado en las regiones y debemos enfocar nuestros esfuerzos en mantenerla para seguir construyendo oportunidades para todos los colombianos”, dicen los congresistas.

La decisión de sacar de la presidencia del conservatismo a Trujillo y poner a Cepeda será oficializada en los próximos días, en la reunión del directorio.

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