En la recta final de la contienda presidencial en la que cualquier respaldo, salida en falso o propuesta pueden restar votos, desde la campaña del aspirante por el Centro Democrático, Iván Duque, han empezado a marcar distancia de los apoyos cuestionados que, voluntariamente, empiezan a llegarle.
Este jueves, por ejemplo, desde su cuenta de Twitter, el senador Álvaro Uribe rechazó públicamente la adhesión al proyecto de su pupilo, por parte del condenado exalcalde de Cúcuta, Ramiro Suárez, preso en La Picota de Bogotá y quien ha sido denunciado varias veces por hacer política desde su sitio de reclusión.
“Por qué abusan, por qué ponen al señor Ramiro Suárez, de Cúcuta, a adherir al dr Iván Duque, quien públicamente ha rechazado este tipo de adhesiones!(sic)”, escribió Uribe.
Esto, luego de que circulara un video de una manifestación organizada por Suárez y su movimiento, en la que les advirtió a sus seguidores que en vista de que en los comicios del pasado 27 de mayo no les fue como esperaban, “No tenemos otro palo con qué ahorcarnos, que votar por Duque. Vamos a votar”.
No obstante la decisión de Suárez, el propio Iván Duque ya les hizo un primer desplante tanto a él como al gobernador William Villamizar Laguado, el pasado martes, durante una visita relámpago que hizo a Cúcuta y en la que era esperado en el encuentro nacional de diputados.
Aunque su participación estaba confirmada, a última hora el candidato decidió no asistir, al percatarse de que en el sitio había delegados del exalcalde y que el mandatario departamental había hecho parte de la organización de la actividad.
