Las dos últimas semanas en el Cúcuta Deportivo femenino fueron convulsionadas y no propiamente por el actuar del equipo sobre los terrenos de juego –en los que acumula tres triunfos al hilo- sino por los remezones administrativos, de cuerpo técnico y plantel..
La institución fronteriza optó por participar en esta temporada luego de estar ausente de la competencia por cuatro años consecutivos. El regreso se logró, en cierta medida, gracias al apoyo de la empresa privada y en específico de la Transportadora de Valores RAF.
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Con dicha organización, el Cúcuta estableció un acuerdo de colaboración deportiva permitiendo que la misma tuviera roles gerenciales así como de conformación y elección de la nómina.
Pero este acuerdo llegó a su fin, según le afirmó a este medio Wilmar Sánchez, presidente del Cúcuta Deportivo.
¿Qué motivó el fin del acuerdo?
La relación habría terminado a causa de que se empezaron a presentar atrasos salariales y esto fue evidenciado en el juego ante Real Santander, cuando las futbolistas motilonas -durante los actos protocolarios- alzaron sus brazos en señal de protesta.
“Se empezaron a presentar unos problemas de pago y nosotros al estar inmersos en el acuerdo de reorganización empresarial, no podíamos generar nuevas deudas. Nos sentamos con el patrocinador, no tenían los recursos a la mano y para evitar problemas, optamos dar por terminada la colaboración deportiva”, comentó Sánchez.
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La coordinación estaba siendo cargo de Mauricio Rodríguez, quien salió de la institución.
En medio del acuerdo, el Cúcuta también habría presentado algunos incumplimientos.
La primera reacción que se dio fue la salida del director técnico Jhon Ortega, quien llegó una semana antes del inicio del campeonato y tuvo un registro de un empate, una derrota y una victoria.
En su reemplazo llegó Carlos Eduardo Hernández, quien inicialmente fue el elegido para comandar el proyecto, pero fue sustituido después de hacer toda la pretemporada.
Carlos Eduardo Hernández, técnico del Cúcuta Deportivo femenino.
“Tomamos el proyecto por completo y nos pusimos al día. No hubo nada personal con el cuerpo técnico anterior, pero decidimos que Carlos Eduardo volviera a asumir. Nos reunimos con las jugadoras, explicamos la situación, se respetó a quienes quisieran seguir con el equipo y también a las que no estuvieron y quisieron renunciar”, aseguró el presidente.
Dos renuncias
Debido a la situación, la jugadora peruana María José López y la colombiana Joselyn González, optaron por renunciar al club.
“Expresamos nuestro agradecimiento y respaldo hacia el cuerpo técnico, que estuvo con nosotras todo este tiempo. Por su abrupta e injustificada salida es que nuestro vínculo con el Cúcuta ha llegado a su fin, además de los desacuerdos laborales comunicados a último momento”, compartieron por medio de un comunicado.
Sánchez le dijo a La Opinión que las salidas se dieron en mutuo acuerdo con todo lo ordenado por ley, y sin ningún inconveniente frente a los ‘paz y salvo’ para quedar libres y poder ser contratadas por otros equipos.
Cúcuta se encuentra en la cuarta posición de la Liga con 10 puntos de 15 posibles. Su próxima actuación será ante Deportivo Cali, el viernes 5 de abril, en el marco de la sexta fecha.
En la parte de gerencia deportiva, las motilonas estarán bajo la batuta de Carlos Quintero.
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