La avanzada que dispuso el Centro Democrático en las últimas semanas para darles un impulso a los candidatos del partido en Cúcuta y Norte de Santander, y que encabezan sus principales dirigentes, empezando por el expresidente Álvaro Uribe Vélez, continuó este sábado.

El turno en esta oportunidad fue para la senadora Paloma Valencia, quien estuvo en la ciudad acompañando varias reuniones y actividades de campaña de los aspirantes a la Gobernación, Jorge Eduardo Mora López, y a la Alcaldía de Cúcuta, Juan Carlos García-Herreros.

La congresista dijo que vino a pedirles a los cucuteños y nortesantandereanos, que “ese amor que tienen por el presidente Uribe” y el sentimiento de respaldo que les ha brindado el departamento  durante años, se traduzca en una victoria en las elecciones del 29 de octubre.

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“Queremos pedirle a Cúcuta y Norte de Santander que expresen su cariño por la mano firme, para exigir seguridad, y el corazón grande, para solucionar los problemas sociales, marcando en estas elecciones por el Centro Democrático”, manifestó.

Para Valencia, los habitantes de esta región del país necesitan alcaldes y un gobernador que con respecto, pero firmeza, le hagan saber al Gobierno Nacional que “la política de brazos y manos caídas de la Policía no está dando resultados”.

“La seguridad no es una concesión que le hacen los violentos a la sociedad, la seguridad surge del ejercicio de la autoridad del Estado. Cuando el Gobierno renuncia a la autoridad y considera que a través de dádivas y beneficios a los violentos vamos a tener seguridad, pasa lo que le pasó al Catatumbo cuando propuso que les pagaban para erradicar, y es que todo mundo empezó a sembrar, para erradicar”, dijo.

‘Norte quiere un cambio’

La congresista del Centro Democrático se mostró optimista del ambiente que hay para estas elecciones locales en Norte de Santander, pues insistió en que sigue habiendo una gran simpatía por el jefe natural de la colectividad, el expresidente Álvaro Uribe, que espera se traduzca en votos.

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“Veo gran entusiasmo, pero, por supuesto, está la dificultad de unas maquinarias muy fuertes en el departamento. Sin embargo, hay que decirle a la ciudadanía que las maquinarias se derrotan fácilmente con la voluntad del ciudadano”, señaló.

La senadora dijo que si esta región quiere un cambio, tiene que empezar por cambiar el tipo de gobierno local que ha tenido por años y entender que unas elecciones como las que se avecinan son tan importantes como las presidenciales.

“Para tener seguridad se necesita mano firme y la mano firme la representa el general Mora y el doctor García-Herreros. Pero Norte de Santander también necesita un enorme corazón, pues hay unos problemas sociales de gran calado en términos de desempleo, una inmigración gigantesca, una pobreza que se ha ido tomando muchos rincones del departamento y eso necesita esa combinación de la mano firme y el corazón grande”, reiteró.

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Valencia dijo que los comicios de octubre son fundamentales para que la oposición adquiera un mayor respaldo, pues “si Norte de Santander quiere que el ejercicio de oposición empiece a dar resultados, necesitamos que nos permitan ganar aquí”.

‘Sin garantías de seguridad’

Al igual que lo denunciaron días atrás integrantes del partido en el departamento, la congresista Paloma Valencia ratificó que el gobierno de Gustavo Petro no está ofreciendo las garantías necesarias para el ejercicio democrático.

“Estamos viendo las alertas de la Defensoría donde 600 municipios tienen algún tipo de riesgo para realizar las elecciones y, por supuesto, cuando se mira el mapa, sorprende la coincidencia con las zonas en donde hay cultivos ilícitos”, aseguró.

Agregó que donde hay plantaciones ilegales no hay garantías porque el Gobierno reemplazó las políticas contras las drogas y lo que hoy se puede observar en el país es una toma del control por parte de los violentos, y la disminución del precio de la coca, pero por el fentanilo.

En ese sentido, la dirigente uribista cuestionó la forma en que ha procedido Petro frente a su propuesta de ‘Paz total’, al considerar que la no aplicación de la ley y el orden lo único que lleva es a incentivar el delito.

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“Si usted les dice a los jóvenes colombianos que la manera de ganarse un millón de pesos es dejando de matar, pues lo primero que tienen que salir a hacer es matar, para poder entrar en el programa. Creo que el mensaje que se le da a la sociedad es  equivocado. Ese millón de pesos debería ser para el colombiano que trabaja, que tiene unos hijos, una empresa, que quiere salir adelante, pero darle plata a la criminalidad lo único que va a lograr es que muchos jóvenes piensen que la criminalidad se paga”, planteó.

La senadora consideró que son estos argumentos los que deben tener en cuenta los electores a la hora de salir a votar.

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