Los gases que emiten los combustibles fósiles en Colombia no tienen una incidencia significativa en el calentamiento global, por eso, según el exsenador Jorge Enrique Robledo, considera relevante que cada país haga su análisis específico sobre cómo está contribuyendo al problema ambiental que enfrenta el mundo, porque “no es lo mismo China que Colombia”.
Robledo participó en foro ‘El carbón y su camino a la sostenibilidad’, organizado por el diario La Opinión y la Asociación de Carboneros de Norte de Santander (Asocarbonor), junto con el ex viceministro de Minas y presidente ejecutivo de Fenalcarbón, Carlos Cante; y el empresario Elkin Becerra, integrante de la Junta Directiva del gremio regional.
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“Colombia es un país tan atrasado que ni CO2 produce; producimos cerca del 0,2% del total de las emisiones de C02 del mundo. Entonces, que no nos vengan a decir que hay que destruir la economía nacional por el problema del calentamiento global, porque si lo hiciéramos, el problema global y en Colombia seguiría siendo el mismo.
El dirigente del partido Dignidad, quien durante 20 años perteneció a la Comisión de Asuntos Ambientales del Senado, afirmó que hay que reconocer la situación del mundo, pero también se deben ver las otras realidades, debido a que hay un puñado de países que genera el 80% del calentamiento global.
“Destruirle a Norte de Santander su economía del carbón sería un crimen y nada se resolvería”.
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Para Carlos Cante, lo que le ha faltado a la sociedad es información sobre el impacto de la industria del carbón y el coque y cuál es la contribución del país a los datos a nivel global sobre el cambio climático.
“Colombia tiene unas reservas probadas de carbón equivalentes a tan solo un año del consumo mundial, que son 8.000 millones de toneladas. Si fuera posible extraer esas toneladas, solo alcanzaría para el mundo durante un año y no moveríamos la aguja de atrasar los efectos del cambio climático en un grado centígrado”.
El presidente ejecutivo de Fenalcarbón recalcó que el país explota, entre carbones térmicos, metalúrgicos y producción de coque, menos del 1% del consumo mundial, por lo que cabe discutir la responsabilidad de Colombia en la generación de CO2 a nivel mundial.
Elkin Becerra indicó que la discusión sobre las emisiones del sector carbón y del coque se debe dar en torno a cómo tratar esos gases y no fijarse solo en el lunar. Resaltó que no está bien tomar la vía rápida, que es eliminar la minería y los combustibles fósiles.
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El dirigente gremial de Asocarbonor lamentó que se deje a un lado la investigación para tratar esas emisiones, lo cual puede impulsar mucho desarrollo. “Hoy en día, las empresas de carbón están estudiando cuáles son las emisiones que se generan. Existen tecnologías para tratar cada una de ellas, incluso para hacerlas un foco de progreso”.
El ingeniero puntualizó que, hasta el año pasado, la Agencia Nacional de Minería (ANM) estaba trabajando en unos proyectos para producir hidrógeno azul, por medio de la quema de unos carbones especiales, por lo que invitó a las autoridades a enfocarse en los beneficios, el futuro y el desarrollo que se pueden generar con este sector.
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