Luego de conocerse la primera oferta oficial por parte de las centrales obreras, las cuales piden que el aumento del salario mínimo para 2023 sea de un 20%, diferentes sectores se han pronunciado frente a las consecuencias de este incremento.

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Para María Claudia Lacouture, presidenta de Aliadas, organización conformada por 40 gremios y asociaciones empresariales, el aumento propuesto debe ser analizado más a fondo debido a las posibles consecuencias que podría generar.

“Creemos que un incremento debe estar muy cerca a la cifra de inflación causada, más el dato de productividad, dado el contexto inicial externo e interno, la inflación, las altas tasas de interés y los cambios en los costos salariales que se vienen planteando pueden hacer una injerencia en la desaceleración de la economía”, señaló Lacouture.

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La líder de la organización empresarial agregó que se deben tener en cuenta ciertas variables, una de estas es impacto que tendría la generación de empleo, pues según el Banco de la República, por cada punto que se incremente por encima de la inflación se puede perder cerca de 72 mil empleos.

Para este lunes se espera una nueva mesa de concertación, para que los representantes de los gremios empresariales evalúen la cifra ya propuesta por las centrarles obreras.

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