La Opinión
Suscríbete
Elecciones 2023 Elecciones 2023 mobile
Ocaña
El día de Navidad, Carlos Julio Rincón cumplió 111 años
‘Cóndor’ vive en Ocaña y habló con La Opinión sobre el secreto de su longevidad.
Image
Leonardo Favio Oliveros Medina
Leonardo Favio Oliveros
Domingo, 26 de Diciembre de 2021

En Ocaña hay un Matusalén, el abuelo de Noé que vivió 969 años, según la Biblia. El pasado 24 de diciembre, día en el que también se celebró el nacimiento del Niño Jesús, sopló 111 velitas de cumpleaños. Se trata de Carlos Julio Rincón Garzón.

Este hijo de Convención vino al mundo el año en que el cometa Halley, que pasa por la Tierra cada 76 años, fue visible desde Bogotá en 1910; así como el año del Centenario de la Independencia. Además, ha sobrevivido a dos pandemias que han llegado a Colombia: la gripe española y el coronavirus. 


Lea además Dejó de raspar coca y ahora enseña a los niños a leer

También fue testigo de la violencia bipartidista que azotó a Colombia entre 1948 y 1958 y de grandes acontecimientos del último siglo. 

Este nortesantandereano, de caminar lento y voz suave, pero lleno de alegría, tiene la fortuna de ser uno de los más longevos del país, si no es el que ocupa el primer lugar de ese récord. A él le dicen ‘Cóndor’, por su semejanza con este animal de no dejarse doblegar. 

El secreto 

 

Carlos Julio Rincón

(Una de las pasiones de Carlos Julio Rincón ha sido tocar la guitarra. Su hija Miryam recuerda lo parrandero que fue. / Foto: Javier Sarabia)

Sobre el secreto de su longevidad cree que llegar a esa edad es una bendición de Dios y que ha sido posible gracias a una vida tranquila, a pesar que de joven bebía aguardiente y no se perdía fiesta o celebración con amigos, con quienes le gustaba toca guitarra.

La música carranguera le inyecta energía y no duda en levantarse a bailar a su ritmo cada vez que la escucha en un festejo en su hogar. “Él montó en ese cable aéreo (metrocable) que conectaba a Gamarra con Ocaña en 1930 –inaugurado el 7 de agosto  de 1929-”, recordó Miryam Rincón, una de las hijas del hombre centenario.

‘Cóndor’ se quedó huérfano a los cinco años, junto a su hermana, cuatro año mayor que él. La tía Ximeona Rincón, que murió a los 99 años, los crió. Y parece que la longevidad viene de la sangre, pues esa hermana falleció de 96.

Carlos Julio Rincón

(En su casa, en La Piñuela, una de las paredes muestra la ‘Genealogía del Cóndor’, como le dicen a este hombre centenario.)

Después de una primera relación amorosa en la que no tuvo éxito, contrajo matrimonio con, Leonor Lozano, oriunda de González, Cesar. Desde muy joven se dedicó a trabajar en el campo, logrando comprar su primera finca en Gamarra. Siempre estuvo dedicado a las actividades agropecuarias.


Le puede interesar Policía le cumplió el sueño a quinceañeras en Pamplona

Con gran esfuerzo formó a sus dos hijos de la primera pareja y a los nueve que llegaron después con su esposa que lo acompañó hasta hace algunos años y que ya partió a la eternidad. Su legado es amplio, porque ya cuenta con 45 nietos, 43 bisnietos y siete tataranietos.

“Papá nos contaba que él fue muy travieso, siendo niño se iba a una finca cerca de su casa y amarraba cinco perros y donde viera un hormiguero lo escarbaba para dejar a los perros ladrando. Una vez, haciéndose el borracho, llegó a la casa y nosotros comenzamos a buscarlo. Se había escondido en el baño, de donde salió riéndose de nosotros. Cuando se iba de fiesta el fin de semana se perdía hasta el lunes o martes”, relató la hija.

Miryam cuenta una anécdota y sonríe cada vez que la recuerda. Cuando ella era una bebé, su madre mandó a su padre a comprar la leche para ella; era viernes. Sin embargo, llegó el lunes y sin el encargo, porque se encontró con unos amigos y se quedó formando la parranda.

Carlos Julio Rincón

(Carlos Julio ha sobrevivido a dos pandemias que han llegado a Colombia.)

Un error 

 

Igualmente, resaltó que su padre tramitó la cédula de identidad a principio de los años 50 y cuando fue hacerlo no se acordaba el año de su nacimiento, quien sabía era su tía. 

“La persona que lo atendió le dijo: ‘no le pare bolas a eso’, y le pusieron un año que se les ocurrió. Cuando la cédula le llegó, mi tía lo regañó y lo mandó a que fuera a corregir el error”.

Cuando Rincón Garzón acudió parar hacer la modificación (con 7 años menos), le dijeron que eso no importaba, porque lo realmente relevante era que pudiera ejercer su derecho al voto con esa cédula y por eso nunca hizo el cambio. 


Lea también Gramalote, a 3% de quedar listo

‘Cóndor’ pasa sus días en su casa en el barrio La Piñuela de Ocaña, en donde vive desde hace 48 años. Pasa una vida tranquila, disfrutado a su familia. Escucha la misa por la radio o la ve por la televisión todos los domingos. 

Carlos Julio Rincón

Eso sí, cuando algún vecino muere, inmediatamente va y cierra la puerta, porque dice: “para acá que la muerte ni voltee a mirar, todavía no me voy”.

Para su hija, es una bendición y un orgullo que su papá tenga 111 años, porque no cualquiera llega a esa edad, por lo que espera que el día que muera “se vaya así como esta”, alegre y sin sufrir, porque “él le irradia amor a todo el que llega”. 

Carlos Julio Rincón

Por eso, cada 24 de diciembre, más que celebrar Navidad, el motivo mayor que los reúne como familia es el cumpleaños de Carlos Julio.

Gracias por valorar La Opinión Digital. Suscríbete y disfruta de todos los contenidos y beneficios en: http://bit.ly/SuscripcionesLaOpinion

Temas del Día